La desaparición de Madeleine McCann tiene al mundo entero con intriga desde el 3 de mayo de 2007, cuando ocurrió el suceso. La niña británica, de entonces tres años, se encontraba de vacaciones con su familia en Portugal. Luego de 16 años del hecho, su hermana Amelie se hizo presente en la vigilia en su honor, y pidió por su aparición.

Amelie y Sean McCann se encontraban en la misma habitación de hotel de Praia da Luz que Madeleine, el último lugar en el que sus padres vieron a la pequeña. Los mellizos tenían poco más de dos años y dormían al momento que presuntamente su hermana fue sustraída del lugar, donde también estaba descansando, sin supervisión de un adulto. Por ello, ninguno de ellos pudo atestiguar de lo que sucedió en aquel momento, en el que la vida de toda su familia se paralizó.

La casi nula presencia de testigos en los últimos minutos de Madeleine cerca de su familia acrecentaron las distintas versiones sobre lo sucedido en aquella noche del 3 de mayo. Desde un secuestro hasta un crimen intrafamiliar, fueron las teorías que manejaron las autoridades policiales acerca de la desaparición de la niña, que aún es buscada en todas partes del mundo. Más allá de la gran movilización de sus padres y los recursos que pudieron adquirir para que se continúe la investigación, aún no dieron el resultado esperado: encontrarla.

Sin embargo, sus esperanzas no cesan. Recientemente, la familia y allegados realizaron su tradicional vigilia anual en un nuevo aniversario de la desaparición. La reunión tuvo lugar en Rothley, Leicestershire, pueblo natal de Maddie. Durante la noche, se realizó un encendido de velas en la calle, donde se encuentra un monumento hacia los soldados caídos en la guerra, pero se convirtió en un sitio de conmemoración a niños desaparecidos.

Por primera vez, Amelie asistió acompañada de sus padres, Garry y Kate. La joven tiene 18 años y se trata de una de las pocas veces que su imagen fue compartida públicamente, puesto que durante todo este tiempo de búsqueda su familia intentó resguardarla, como así también a su hermano, quien decidió no ir al reciente evento, al que asistieron al menos 70 personas.

El portal británico Daily Mail fue el que difundió las imágenes de la adolescente, quien también contó con el apoyo de sus amigas. Se la pudo ver conmovida por las palabras dirigidas hacia su hermana por parte del revendo Rob Gladstone, que fue el encargado de emitir la oración: “Estamos aquí esta noche para mostrar nuestra amorosa preocupación por Madeleine y por todos los niños pequeños que han sido separados de sus familias en contra de su voluntad. También estamos aquí para animarnos unos a otros a mantener la esperanza y orar por una renovación de fuerzas incluso después de este largo tiempo”.

Si bien la familia se limitó a escuchar las oraciones y poemas dirigidos a la pequeña y rezar, Amelie hizo una breve declaración en el lugar: “Es bueno que todos estén aquí juntos, pero es una ocasión triste”. Se trata de la primera vez que se escucha a la joven referirse a la desaparición de su hermana.

Las pocas fotografías de la familia McCann que circularon mostraban a los tres niños muy pequeños, previo a la desaparición de Maddie. Allí, Amelie y Sean eran muy pequeños y desde entonces, pocas veces fueron retratados por la prensa, en un intento de resguardar su imagen, debido a que la fama mundial del caso podría interceder en la intención de los padres de que los mellizos puedan tener “una vida normal”.

El misterio acerca de cómo sería la joven, de hoy 18 años, y si se parecería o no a Maddie terminó con la publicación de estas fotografías. Amelie es rubia, con una larga cabellera y ojos celestes y llamó la atención de todos al notar que tiene un gran parecido físico con su hermana, de la que solo se conoce su apariencia de niña, por lo que sería una gran guía para dilucidar cómo se vería actualmente.

La Nación (GDA).