CRISIS
"Venezuela está trabajando el mundo de las criptomonedas como sistema libre para los pagos nacionales e internacionales", afirmó Maduro.
Venezuela trabaja en la adopción de un sistema de pagos nacionales e internacionales con criptomonedas, anunció Nicolás Maduro, en un contexto de restricciones financieras por las sanciones de Estados Unidos.
"Venezuela está trabajando el mundo de las criptomonedas como sistema libre para los pagos nacionales e internacionales", afirmó Maduro.
El mandatario socialista aseguró que el Banco Central de Venezuela (BCV) tiene "nuevos instrumentos" que activará "muy pronto" para hacer transacciones bancarias dentro y fuera del país.
Maduro lanzó en febrero de 2018 el petro como el primer criptoactivo soberano del mundo, pero el proyecto no ha prosperado.
El gobernante reconoce que las medidas punitivas de Washington afectan gravemente los pagos de la deuda externa (estimada en unos 140.000 millones de dólares) y a proveedores del Estado.
"Perjudican a los propios sectores financieros de Estados Unidos que tienen los bonos y la deuda con Venezuela", alegó el líder chavista, quien ordenó a su equipo económico buscar una "renegociación de la deuda".
Maduro ya había anunciado una ronda similar hace dos años, cuando el país fue declarado en default por calificadoras de riesgo, pero la iniciativa nunca se concretó.
Las sanciones de Washington prohíben negociar nueva deuda venezolana (lo que cerró el acceso a financiamiento internacional), así como transar con petros, y desde abril incluyen un embargo al petróleo venezolano, fuente de 96% de los ingresos del país.
La administración de Donald Trump también sancionó al BCV, prohibiendo transacciones de entidades estadounidenses con este organismo, que restringen su acceso a dólares.
Las reservas internacionales del país con las mayores reservas petroleras han caído a niveles históricos, ubicándose actualmente en 7.910 millones de dólares, en medio de la peor crisis de su historia reciente. El FMI proyecta para 2019 una inflación 1.000.000% y una contracción de 35% para 2019.
La presión estadounidense busca que Maduro abandone el poder para que asuma el opositor Juan Guaidó, a quien Trump y medio centenar de países reconocen como mandatario encargado.