ARGENTINA
Los fiscales que actúan en la causa, con orden del juez Orlando Díaz, realizaron requisas en la casa y el consultorio privado de la psiquiatra que atendía al exfutbolista.
La investigación judicial por supuesta negligencia en la muerte de Diego Maradona comenzó por los médicos que lo trataban. Así, la Justicia argentina ordenó ayer martes allanamientos en propiedades de la psiquiatra que atendía a Maradona, a quien investigan junto al médico personal del exfutbolista.
Los fiscales que actúan en la causa, con orden del juez Orlando Díaz, realizaron requisas en la casa y el consultorio privado de la psiquiatra Agustina Cosachov en Buenos Aires, al igual que lo hicieron el domingo con las propiedades del médico personal de Maradona, Leopoldo Luque.
“Son medidas de rutina cuando se investigan causales de muerte de un paciente”, dijo el abogado de la psiquiatra, Vadim Mischanchuk. “Lo que se está buscando es la historia clínica en teléfonos y computadoras”, añadió.
“A esta altura de la investigación tenemos acreditado que Luque y Cosachov estaban a cargo del cuidado de la salud de Maradona. Entonces para resguardar pruebas y secuestrar documentación se decidió allanar los consultorios de la psiquiatra”, explicaron fuentes judiciales al diario La Nación.
Hoy, a siete días de la muerte de Maradona la causa se tramita, provisoriamente, bajo la figura de homicidio culposo.
“Los responsables de la salud y del cuidado médico de Maradona fueron Luque y Cosachov. Ahora necesitamos tener la historia clínica para acreditar cuál fue la medicación que la psiquiatra le recetó a Diego”, agregaron los informantes a La Nación.
En la casa de Luque se secuestró una historia clínica de Maradona, el teléfono celular del médico, dos tablets y dos notebooks.
Las circunstancias que rodearon a la muerte de Maradona, fallecido el miércoles pasado en una casa del barrio cerrado San Andrés, en Benavídez, en Tigre, es investigado por un equipo especial de investigadores que formó el fiscal general de San Isidro, John Broyad.
Fuentes judiciales aclararon que, hasta el momento, ni Luque ni Cosachov están imputados en el expediente.
El abogado de una de las enfermeras que cuidaban a Maradona, Rodolfo Baqué, tras presentarse en la fiscalía dijo que en la casa en la que el astro realizaba la recuperación de una operación de la cabeza y un tratamiento por sus adicciones, “no había las medidas mínimas para cuidar a un paciente”.
“El corazón falló porque Maradona no fue contenido”, dijo Baqué.
“Los culpables, por lo que pude ver, son los médicos tratantes, Luque y la psiquiatra”, apuntó el abogado.
Luque se personó el lunes en la Fiscalía para informarse de su situación, pero no le tomaron declaración al no estar formalmente acusado.
Maradona tenía 60 años y había estado ingresado a inicios de este mes en dos centros de salud por anemia, deshidratación y un hematoma subdural por el que finalmente fue operado. Murió como consecuencia de un paro cardíaco.
El exfutbolista había recibido el alta médica de la clínica Olivos en la que fue operado el 11 de noviembre.
Representantes legales de la familia y del propio Maradona indicaron a EFE que en la causa abierta por “averiguación de causales de muerte” se investiga qué tipo de atención médica recibió el exfutbolista desde la operación hasta su deceso, pero en particular desde que recibió el alta médica, y cuál era el cóctel de medicamentos que debían suministrarle.
Los abogados de la familia también quieren que se investigue qué sucedió el 19 de noviembre cuando, según dos testimonios con los que cuentan los letrados, Luque visitó a Maradona en su casa y ambos discutieron.
Desde entonces, según estos dos testimonios, presuntamente el médico no habría retornado más al lugar para brindarle atención de forma personal, lo que podría configurar eventualmente un “abandono de persona”, según los letrados de la familia.
“Los que estaban al lado de Maradona saben lo que pasó y cuál fue la actividad de Luque, que fue perfecta. Lo operó de una neurocirugía y salió perfecto”, dijo a la prensa Julio Rivas, abogado del facultativo, en referencia a la intervención que se le hizo al exfutbolista, por un hematoma cerebral, el 3 de noviembre.
Los profesionales investigados.
Los fiscales que actúan en la causa realizaron requisas en la casa y el consultorio privado de la psiquiatra de Maradona en Buenos Aires, al igual que lo hicieron el domingo con las propiedades del médico personal del exfutbolista, Leopoldo Luque. De la casa de la psiquiatra, se llevaron la historia clínica del astro del fútbol mundial, 12 recetas médicas a su nombre, dos teléfonos celulares, una tablet y una notebook.
Los abogados de la familia de Diego Maradona quieren que se investigue qué sucedió el 19 de noviembre cuando Luque visitó a Maradona en su casa y ambos discutieron. Desde entonces presuntamente el médico no habría retornado más al lugar para brindarle atención de forma personal, lo que podría configurar eventualmente un “abandono de persona”, según los abogados de la familia.