O Globo/GDA
Isabel Cristina Fernandes Martins, una dentista brasileña de 34 años, fue asesinada a puñaladas por su hermano, Ezequiel Martins, frente a su anciana madre en Gravatal, en el sur de Santa Catarina, durante una pelea por una herencia.

El crimen ocurrió el jueves, alrededor de las 16:00 horas, cuando el asesino apuñaló a la víctima varias veces con un cuchillo. Los hermanos habían estado en litigios durante años por disputas de propiedad.

Según información policial, Ezequiel agredió a Isabel cuando esta iba a la casa de su madre a llevarle una torta de cumpleaños, pues al día siguiente la anciana cumpliría 73 años. La víctima estaba embarazada y probablemente le contaría la noticia a su madre.

Isabel intentó escapar tras ser golpeada varias veces, pero no pudo resistir y murió en el lugar.

El esposo de la víctima, Eduardo Marcirio, publicó un mensaje de despedida a su esposa. "¡El anhelo que dejaste nunca se colmará en nuestros corazones! Te amo por siempre, mi amor", dijo.

En las redes sociales, el sobrino de la víctima lamentó la muerte de su tía y recordó los últimos 14 años de convivencia y compañerismo. Tras la detención del asesino, el niño, conocido como João do Cross, también se pronunció: "Espero que se pudra en la cárcel", escribió.

En un comunicado, la policía informó que se conformó un grupo de trabajo para capturar al delincuente que huyó hacia el terreno de la familia (varios terrenos empinados y grandes en los barrios Pouso Alto y Riacho). El operativo contó con el apoyo de grupos tácticos, perros rastreadores, Policía Civil, Policía Militar, Bomberos y el helicóptero de la Policía Civil.

El Ministerio Público se pronunció por la detención temporal de Ezequiel, quien fue enviado a la Prisión Regional de Tubarão.