Redacción El País
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, descartó ayer lunes un alto el fuego con Hezbolá en Líbano hasta que el grupo terrorista libanés “capitule”. “No habrá alto el fuego y no habrá pausa en los ataques contra Hezbolá”, dijo Katz en un discurso ante el Estado mayor del ejército israelí.
Pero si hay una propuesta para un acuerdo de alto el fuego “que signifique la rendición de Hezbolá y cumplir con todas nuestras condiciones (...) ciertamente lo consideraremos muy seriamente”, agregó.
El ministro aseguró además que “Irán es más vulnerable que nunca a un ataque contra sus instalaciones nucleares” y que existe un amplio consenso para que sean neutralizadas. Katz asumió hace cuatro días el cargo tras el cese de Yoav Gallant por desacuerdos con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, en la guerra de Gaza.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, principal socio de Israel, se ha opuesto a un ataque contra las instalaciones nucleares en Irán. El pasado 2 de octubre, Biden mostró su claro rechazo a esta opción planteada desde hace años por Israel. “La respuesta es no”, afirmó ese día Biden ante la posibilidad de que Israel tomara represalias por un ataque anterior iraní con misiles balísticos contra su territorio.
En cuanto a la Franja de Gaza, Katz insistió en que “la primera y más importante” cuestión es la liberación de los 97 rehenes que continúan en manos de Hamás. “Este es el objetivo ético más importante para el sistema de seguridad”, dijo Katz.
Cumbre árabe
Por su parte, los países árabes y musulmanes instaron ayer lunes a Israel a retirarse de todos los territorios que consideran ocupa desde 1967 para lograr una paz regional “global”, durante una cumbre celebrada en Arabia Saudita. “Una paz justa y global (...) no puede lograrse sin poner fin a la ocupación israelí de todos los territorios árabes ocupados” desde junio de 1967 -Cisjordania y Jerusalén oriental, Gaza y los Altos del Golán sirios- “conforme a la Iniciativa de Paz Árabe de 2002”, que ofrecía a Israel la normalización regional a cambio de la creación de un Estado palestino, indica la declaración final de la cumbre.
Los líderes de más de 50 países árabes e islámicos acordaron además pedir “congelar la participación de Israel en Naciones Unidas” y prohibir la exportación de armas al Estado judío. Manifestaron “la necesidad de movilizar el apoyo internacional para congelar la participación de Israel en Naciones Unidas”. (AFP, EFE)
-
Partido de fútbol Francia-Israel despierta las alertas de las autoridades por riesgo de violencia
Netanyahu reconoce haber dado luz verde al ataque de los bípers contra Hezbolá que dejó miles de heridos en Líbano
Catar suspendió su mediación en la guerra de Medio Oriente, por “falta de avances” en las conversaciones