ESTADOS UNIDOS
"Este es un día histórico en Nueva York, en el que se corrigen los errores del pasado al poner fin a las duras sentencias de prisión", dijo el gobernador Andrew Cuomo.
En el estado de Nueva York consumir marihuana ahora es legal, en tanto el de Virginia tiene previsto dar ese paso en julio. Nueva York se unió a otros 14 estados de Estados Unidos -más el distrito de Columbia donde está la capital Washington- que permiten el uso del cannabis.
El gobernador de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, promulgó ayer miércoles el proyecto aprobado por la Asamblea estatal a última hora de la noche del martes, que hará borrón y cuenta nueva para los acusados de delitos relacionados con la marihuana.
“El proyecto de ley crea la expurgación automática de las condenas anteriores por marihuana que ahora serían legales”, escribió Cuomo en Twitter. “Este es un día histórico”, agregó el gobernador.
Por su parte, el gobernador de Virginia, Ralph Northam, propuso adelantar la legalización de la posesión de marihuana a julio en lugar de esperar hasta 2024.
Northam dijo que las disparidades raciales en la persecución de los delitos relacionados con la marihuana lo impulsaron a acelerar el calendario. El gobernador citó un informe de la Comisión Conjunta de Auditoría y Revisión Legislativa que reveló que los residentes de raza negra tenían más del triple de probabilidades de ser arrestados por poseer pequeñas cantidades de la droga.
“La legalización de la marihuana es un imperativo racial y de justicia penal, y la votación de hoy es un paso crítico hacia un sistema más justo y equitativo”, dijo la fiscal general de Nueva York, Letitia James, en un comunicado.
El agujero fiscal provocado por la pandemia de COVID-19 ha sido una de las razones que ha desbloqueado el debate sobre la legalización de la marihuana y ha acelerado su aprobación, según analistas.
El sitio web oficial del estado de Nueva York proyectó recientemente que la recaudación de impuestos del programa de cannabis para adultos alcanzaría los 350 millones de dólares anuales y también crearía entre 30.000 y 60.000 nuevos puestos de trabajo en todo el estado. El 40% de los ingresos fiscales por la venta de marihuana se destinarán a las comunidades negras y latinas.
La ley permitirá a mayores de 21 años comprar cannabis y cultivar plantas para su consumo personal. También eliminará multas por posesión de hasta 85 gramos de la droga, el nuevo límite de posesión personal. Y un programa ya existente de uso médico de la marihuana será expandido.
“La última vez que el estado hizo algo como esto fue cuando pusimos fin a la prohibición del alcohol”, dijo la asambleísta Crystal People-Stokes, patrocinadora del proyecto en la Cámara baja.
“Eso fue en 1933. Los estudios nos dicen que más personas que no son de color usan el producto, pero las personas de color fueron las que fueron arrestadas y encarceladas”, afirmó.
En diciembre de 2013, Uruguay fue el primer país del mundo en legalizar la producción y consumo de marihuana para uso personal.