O Globo/GDA
Durante el fin de semana, la compañía aérea Voepass canceló todos los vuelos de la ruta Fortaleza-Fernando de Noronha-Natal hasta el 31 de agosto, alegando que se trata de una “operación de contingencia” tras el trágico accidente del viernes que provocó la muerte de 62 personas.

El avión que realiza la ruta, un turbohélice ATR-42 con capacidad para 48 pasajeros, un modelo más pequeño que el que se estrelló en Valinhos (SP), presentó una serie de problemas de mantenimiento que causaron gran preocupación entre la tripulación, según un informe de denuncia presentado en febrero por un miembro de la tripulación ante la alta dirección.

El empleado informó de varios daños en el avión , entre ellos un desgarro en el sistema de protección antihielo del ala, precisamente una de las posibles causas que podrían haber provocado una pérdida de sustentación en el ATR-72 que se estrelló.

Foto: Globo TV/AFP

En la denuncia, el tripulante relata que el avión -cuya matrícula es PR-PDS- hizo desvíos y virajes durante el vuelo y, al preguntar por qué, escuchó que era para evitar zonas de formación de hielo. Las fotografías tomadas el día de la denuncia muestran que el sistema de deshielo —una goma que protege el ala y se infla para expulsar el hielo si se forman cristales— tenía dos roturas y por lo tanto no funcionaba, como se puede observar en la imagen que acompaña este reportaje.

El sistema de deshielo sólo se considera un elemento crítico para el despegue —en el que está prohibido volar si no funciona correctamente— si se prevé formación de hielo en la ruta. La formación de hielo depende de la altitud y puede ocurrir en el noreste o sur del país.

En el mismo reportaje, el tripulante relata que escuchó por sus compañeros que el avión también tenía uno de sus cuatro frenos rotos. Además, según el informe, el neumático tenía una “burbuja” de 6 cm de espesor, corriendo el riesgo de estallar durante el aterrizaje. La puerta del avión también tiene un hueco lo suficientemente grande como para pasar una mano.

Según informes de tripulantes y extripulantes de Voepass escuchados por O Globo, el avión fue prohibido por la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) en mayo y estuvo estacionado por algunos días en el aeropuerto Fernando de Noronha.

La cancelación de vuelos hasta el día 31 no sacó al avión de la red. El avión tiene previsto volar esta semana en las rutas Recife-Campina Grande y Recife-Natal-Mossoró.

El PR-PDS entró en servicio hace 26 años en México, donde voló durante 19 años. Luego pasó a operadores de Colombia e Irlanda. En 2020 llegó a Brasil a través de la empresa brasileña MAP, que poco después fue adquirida por Voepass. Al año siguiente, Gol compró MAP, pero sólo su registro. Meses antes, MAP y Voepass habían obtenido espacios en Congonhas, en una ronda de distribución promovida por ANAC.

La ANAC confirmó que la aeronave Voepass fue retirada de operación para revisar elementos de seguridad. Además del PR-PDS, la inspección de la ANAC afectó al segundo avión de la compañía en el aeropuerto —utilizado en la ruta Recife-Noronha— y también a un ATR Azul.

Voepass no hizo comentarios sobre los problemas con el avión. La compañía difundió una nota sobre la cancelación del vuelo de Fernando de Noronha. "Voepass lamenta los contratiempos ocasionados por la contingencia de su ruta. Estamos trabajando para minimizar las molestias a nuestros clientes", señala el comunicado.

"La ruta Recife-Fernando de Noronha se mantiene en dos horarios diferentes. Las demás rutas quedaron suspendidas hasta el 31 de agosto", cierra.