VISITA

El papa Francisco viaja desde hoy y hasta el 29 de julio a Canadá para, sobre todo, pedir perdón a las comunidades indígenas por los abusos que sufrieron en los internados católicos, una visita que pondrá a prueba sus problemas de movilidad debido a su dolor en la rodilla que le impiden caminar y que le habían ya obligado a cancelar otros viajes.

Todo indica que el papa se ayudará con una silla de ruedas para moverse en este viaje. La visita responde a la petición de las comunidades indígenas para que el representante de la Iglesia católica les visitase y pidiera perdón en sus tierras por las vejaciones, abusos y torturas que sufrieron durante los llamados procesos de asimilación ordenados por el Gobierno canadiense desde mediados del siglo XIX hasta finales de los 90 del XX.

Según la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, se crearon 139 escuelas financiadas por el gobierno y administradas por la Iglesia Católica en la que se internaron a unos 150.000 niños indígenas que fueron separados de sus familias, obligados a abandonar sus idiomas, tradiciones y cultura.

En esos internados sufrieron abusos de todo tipo y se estima que más de 3.000 niños murieron por enfermedades debido a las condiciones en las que vivían, de hambre, hacinamiento y falta de higiene. Fueron enterrados en fosas comunes sin ninguna identificación. EFE