AFP
El nuevo secretario general del Partido Socialista Portugués (PS), Pedro Nuno Santos, fue investido oficialmente ayer, domingo, por los militantes del partido del dimitido primer ministro António Costa, salpicado por un asunto de tráfico de influencias.

La dimisión de Costa, en el poder desde finales de 2015, motivó la convocatoria de elecciones legislativas anticipadas para el 10 de marzo. “Nos corresponde la enorme responsabilidad de escribir un nuevo capítulo en el libro de los gobiernos del PS y del desarrollo del país”, declaró el nuevo líder de la izquierda portuguesa, de 46 años, en su discurso de clausura del congreso, que reunió a los militantes de su partido en Lisboa, en presencia de Costa.

Proveniente del ala izquierda del PS, este economista de formación había desempeñado un papel clave en el primer gobierno de Costa, como secretario de Estado para Asuntos Parlamentarios, encargado de las relaciones con los partidos de izquierda radical que permitieron a los socialistas llegar al poder con el objetivo de “pasar página” de la política de austeridad aplicada hasta entonces por la derecha.

Portugal se hundió en una crisis política a principios de noviembre después de que una serie de arrestos y registros condujeron a la acusación del jefe de gabinete de Costa y de su Ministro de Infraestructura por un caso de tráfico de influencias. En ese momento, la Fiscalía informó que el jefe de Gobierno era objeto de una investigación separada y anunció inmediatamente su dimisión, precisando que no buscaría un nuevo mandato.

Según la información publicada el viernes por el medio Observador de Portugal , estaría implicado por actos de prevaricación, sospechoso de haber participado en el desarrollo de una ley de ordenación territorial que beneficiaba a una empresa que proyectaba construir un megacentro de datos cerca del puerto de Sines (suroeste).

La coalición portuguesa Alianza Democrática, integrada por el conservador Partido Social Demócrata (PSD), el democristiano CDS-PP y el Partido Popular Monárquico (PPM), sostuvo ayer que busca alcanzar un Gobierno “mayoritario” que aporte un cambio político ante el “fracaso” de ocho años de dominio socialista. Estas son las bases del acuerdo de la coalición, firmado en Oporto (norte) por los tres partidos para las elecciones legislativas de marzo y las europeas de junio y que incluirá también a personalidades independientes con “espíritu reformista y moderado”.

Alianza Democrática considera que hay una “necesidad imperiosa y urgente de un cambio político y de políticas” tras ocho años de Gobierno socialista y aspira a ser una alternativa “ambiciosa, reformista y moderada”.

El acuerdo prevé alcanzar niveles “elevados” de crecimiento que coloquen al país “entre los mejores de Europa”, mejorar las condiciones de los jóvenes para que no tengan que emigrar y puedan “subir en la vida por su esfuerzo y mérito”. Los partidos quieren reforzar los ingresos y el crecimiento de la economía a partir del “aumento de la competitividad de las empresas y la inversión, la cualificación de los portugueses y la creación de empleo”, entre otros factores.

La coalición afirma que quiere asumir una “fuerte conciencia social”, con la familia como “célula fundamental de la vida”, y se define como “europeísta, lusófona y atlantista”.

Los tres partidos ya integraron una coalición con el mismo nombre a finales de los 70 y principios de los 80.

EFE
El nuevo secretario general del Partido Socialista (PS) portugués, Pedro Nuno Santos, se estrenó el fin de semana en un Congreso Nacional con un discurso en el que, pese a los elogios a la etapa de António Costa, señaló que es momento de cerrar ese “capítulo” y abrir un “nuevo ciclo”.

Durante ocho años Costa lideró un “ciclo político de estabilidad y una gobernación que ha dado pruebas” de funcionar, que “infelizmente” se vio interrumpido el pasado noviembre, dijo Santos.

Aprovechó su discurso para dejar ataques a la derecha, por los años de Gobierno del PSD (centroderecha) y el democristiano CDS-PP bajo las directrices de la troika (2011-2015) y con Pedro Passos Coelho como primer ministro. Y criticó al actual presidente del PSD, que era, recordó, el líder parlamentario en los años de la troika: “Tras más de año y medio bajo el liderazgo de Luís Montenegro, tenemos el vacío”.

Según el socialista, para llenar ese vacío han surgido nuevos partidos a la derecha, Iniciativa Liberal y el ultraderechista Chega, “ambos hijos de la austeridad”. Santos lanzó su candidatura a primer ministro para las legislativas del 10 de marzo.