ENTREVISTA
“Solo se ve gente con valijas y militares”, contó Romina Rinaldi, que viajó junto a Ximena Borrazas a la ciudad polaca Medyka.
Al interactuar con los refugiados, las jóvenes tienen una regla: no llorar delante de ellos. Si sienten ganas de hacerlo, se alejan de la gente, lloran y después retornan con ellos para seguir escuchando sus historias, contaron.
En la noche de su primer día en la frontera, recorrieron una estación de tren en Przemy?l, ciudad cercana de donde se hospedan. Allí, decenas de ucranianos recién llegados se albergaban del frío de la noche, recostados contra asientos, sentados en el piso y hablando entre ellos con tranquilidad. En el edificio se arremolinaban refugiados, periodistas y voluntarios con chalecos amarillos.
Un gran eje de la travesía de las uruguayas fue el deseo de colaborar. Contaron que veían desde España todo lo que sucedía en la guerra, y quisieron asistir a los refugiados e informar sobre lo que estaba ocurriendo.
“Somos dos personas a las que nos apasionan las causas humanitarias y tenemos ganas de ayudar”, se sinceró Rinaldi.
“Me puse a repartir café y chocolates”, manifestó la periodista, que señaló que son numerosos los voluntarios que ayudan a los recién llegados ucranianos distribuyendo víveres.
“La ayuda humanitaria que hay es inexplicable, incluso de sobra; vos vas caminando por la frontera y ves abrigos y comida tirados”, explicó la joven, y añadió que la asistencia que necesitan ahora los ucranianos es principalmente de transporte, para poder salir del país.
Las uruguayas abrieron cuentas para la gente que quiera colaborar con los refugiados. Explicaron que buscarían la mejor manera de ayudar a los ucranianos, ya sea con transporte para salir del país, un caso específico que precise ayuda o donando a una organización benéfica. El colectivo de Abitab que establecieron, llamado “Fondos Ucrania”, es: 123549.
En las dos semanas que lleva la invasión de Rusia a Ucrania, más de 2 millones de refugiados huyeron a países de la Unión Europea.
La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, alertó que el flujo no ha parado y que se trata de un “desafío muy grande” que los 27 deberán afrontar.
“Vamos a ver a más y más personas huyendo de Ucrania (...) No sabemos exactamente cuántas, pero diría millones”, afirmó la comisaria sueca.
Crean Estado mayor para atender a refugiados
Polonia, Francia y Alemania crearon ayer jueves un “estado mayor informal” de sus ministros del Interior para gestionar la respuesta europea ante la afluencia de refugiados que huyen de la invasión rusa en Ucrania, anunció el ministro polaco Mariusz Kaminski. En total, desde el inicio del conflicto, más de 2 millones de personas dejaron Ucrania, y Polonia acoge, por ahora, a más de un millón y medio de estos refugiados. En Korczowa, en la frontera polaca con Ucrania, Kaminski se reunió con su homólogo francés, Gerald Darmanin, y alemana, Nancy Faeser. Organizan fondos de la UE para los países vecinos: Polonia, Eslovaquia, Rumanía y Moldavia”.
EE.UU. reitera que no intervendrá militarmente
Estados Unidos reiteró ayer jueves que no intervendrá militarmente en la guerra de Ucrania, pese a sospechar que Rusia está planeando el uso de armas químicas, afirmó la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki. “La intención del presidente (Joe Biden) de no enviar militares estadounidenses a luchar en Ucrania contra Rusia no ha cambiado”, dijo la secretaria de Prensa en su comparecencia diaria.
Psaki advirtió el miércoles que Rusia podría estar planeando el uso de armas químicas o biológicas en Ucrania en respuesta a las “falsas” acusaciones rusas de que Estados Unidos está financiando un supuesto programa biológico-militar desarrollado en Ucrania.
La portavoz de la Casa Blanca insistió en que Rusia “tiene un gran programa de armas biológicas y químicas” y un “historial de inventar mentiras”. Por ello consideró que hay que “mantener los ojos abiertos” ante lo que ocurra en Ucrania, si bien afirmó que por ahora “no ha habido ningún ataque químico” y que ni Biden ni la OTAN “han cambiado” su postura de no intervenir en la guerra. Tanto Estados Unidos como la OTAN han descartado en varias ocasiones el despliegue de tropas y aviones en Ucrania.