CRISIS POLÍTICA
Heridos de bala en manifestaciones; la justicia prohibe al destituido presidente Martín Vizcarra salir del país por 18 meses.
Violentos choques entre la policía y manifestantes en medio de las protestas por la destitución del presidente Martín Vizcarra, dejaron al menos 11 heridos, dos de ellos con armas de fuego, informaron ayer viernes médicos y organismos de derechos humanos en Lima.
En tanto, la justicia peruana prohibió salir del país por 18 meses a Vizcarra. El destituido presidente es acusado de haber recibido sobornos para dar luz verde a obras públicas mientras ocupaba el cargo de gobernador de la región de Moquegua en 2014.
Vizcarra fue destituido el lunes por el Congreso en un juicio político relámpago y sustituido por el presidente del Congreso Manuel Merino para completar el mandato que finaliza en julio de 2021, lo que desató una ola de protestas en las calles del país.
Miles de personas marcharon en la noche del jueves por el centro de Lima, en una de las manifestaciones más grandes de las últimas dos décadas, en rechazo al nombramiento de Merino.
La coordinadora nacional de Derechos Humanos reportó que las protestas dejaron 11 heridos, entre ellos algunos periodistas, que presentaron impactos de proyectiles y contusiones.
Por cuarta noche consecutiva desde la expulsión de Vizcarra, centenares de personas en Lima y algunas regiones del país tomaron las calles, con varios enfrentamientos con la policía que ha usado bombas lacrimógenas y disparos para dispersarlos.
En las redes sociales se ha denunciado una respuesta desmedida de la policía, agentes de seguridad infiltrados entre los manifestantes y hasta del uso de gas pimienta desde helicópteros. “Es falso que hayamos lanzado bombas lacrimógenas desde helicópteros”, dijo el ministro de Interior, Gastón Rodríguez, a la radio local RPP.
Imágenes de televisión mostraron el cruce de gases lacrimógenos arrojados por la policía y de piedras y bombardas lanzadas por los manifestantes. La protesta dejó cajeros automáticos de bancos y vitrinas de negocios destrozados.
Los manifestantes son en su mayoría de jóvenes -entre ellos muchos universitarios- y las protestas tuvieron lugar desde entrada la noche tras una convocatoria en redes sociales.
“Todo Perú está encendido”, dijo José Vega, un manifestante en Lima, donde muchos portaban pancartas diciendo que Merino no los representa.
La oficina regional de derechos humanos de la ONU dijo el jueves que estaba recibiendo “información inquietante” sobre las protestas.
En tanto, la Comisión Interamericana de DDHH mostró su preocupación por la actuación “excesiva” de la policía y por las detenciones en medio de las protestas.
Batalla legal.
En tanto, el Gobierno de transición de Merino busca evitar que el Tribunal Constitucional de Perú (TC) lo declare inconstitucional al interferir en la demanda que Vizcarra presentó ante el alto tribunal que pide definir los motivos por los cuales se puede destituir a un mandatario.
Así quedó en evidencia con la intención de la nueva ministra de Justicia, Delia Muñoz, de pedirle su renuncia al procurador general, Daniel Soria, que ejerce la defensa del Estado en este caso, al argumentar que el Gobierno de Merino realizaría “un cambio en la estrategia” sobre este asunto.
La demanda competencial ante el TC fue presentada por el Gobierno de Vizcarra tras el primer intento de destitución por “incapacidad moral” que sufrió en septiembre pasado.
En ese momento, el TC aplazó su decisión por un plazo que vence la próxima semana, al tiempo que rechazó aprobar la medida cautelar que solicitó el entonces mandatario para impedir su vacancia en septiembre porque, según los magistrados, no había intención política para apartarlo del cargo en ese momento.