Redacción El País
El Gobierno de Benjamín Netanyahu se vio inmerso ayer lunes en una polémica tras la liberación del director del hospital Al Shifa de Gaza, detenido para ser interrogado por las actividades de Hamás en el centro.
El asunto ha salpicado a varios ministros y al Shin Bet, la agencia de inteligencia interior.
Ayer lunes volvió a Gaza Mohamed Abu Salmeya, director del Al Shifa, que fue detenido el pasado 23 de noviembre para ser interrogado después de que el Ejército descubriera túneles de Hamás bajo el hospital, el más importante de la Franja.
La noticia de su liberación sorprendió a los ministros del Ejecutivo. “Es hora de mandar al jefe del Shin Bet a casa”, escribió en WhatsApp el ultraderechista a la cabeza de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir.
Este cargó en X no sólo contra la inteligencia interior israelí, sino también contra el ministro de Defensa, Yoav Gallant, acusando a ambos de seguir “una política independiente contraria a la posición del Gabinete y del Gobierno”.
El ministerio de Gallant dijo que la decisión depende tanto de la Autoridad de Prisiones como del Shin Bet, y no de Defensa.
La inteligencia interior israelí acusó por su parte a Ben Gvir de no responder a las demandas planteadas por el Shin Bet para ampliar el número de cárceles para afrontar la falta de plazas.
Fuera del Gobierno, el líder del partido Unidad Nacional, Benny Gantz (y el principal competidor contra Netanyahu en una eventuales elecciones), pidió la dimisión de quien decidó excarcelar a Abu Salmeya.
También el jefe de la oposición, Yair Lapid, cargó contra la coalición, asegurando que la “debacle” por esta decisión “es una continuación directa de la anarquía y la disfuncionalidad del Gobierno”.
Netanyahu lamentó la decisión liberar a Abu Salmeya. “Este hombre, bajo cuya responsabilidad nuestros rehenes fueron retenidos y asesinados, debe estar en prisión”, continúa Netanyahu en el comunicado en el que tilda de “grave error y falta de ética” esta liberación.
Hoy martes el director del servicio de inteligencia interior Shin Bet, Ronen Bar, tendrá que presentar sus primeras conclusiones al primer ministro israelí, que ayer pidió una investigación sobre la liberación del director del hospital.
Una vez concluya esta investigación, el mandatario israelí creará un organismo para aprobar la liberación de los prisioneros cuyos interrogatorios hayan finalizado. [EFE]