La Nación/GDA
No hay dudas de que los guardias del Palacio de Buckingham son, en sí mismos, una de las atracciones más grandes para los turistas, que tomaron la costumbre de posar junto a ellos, si van a pie, o los caballos que montan.

Si bien parecen tiernos, agradables y mansos, estos animales no son lo que aparentan y no se aconseja que los turistas se acerquen a ellos.

En la mayoría de los casos suele existir una represalia por parte de del guardia o del animal al acercarse, y esto fue justamente lo que le sucedió a una turista china que fue mordida en el brazo por el caballo de uno de los custodios. El suceso quedó captado en vídeo y la reacción de la turista dio vuelta al mundo.

El curioso suceso ocurrió en las inmediaciones del palacio donde reside el rey Carlos I en Londres. La turista, de origen chino, se dirigió hacia el pórtico donde se encontraba uno de los guardias arriba de un caballo negro.

En ningún momento obedeció al cartel impreso en una placa, el cual rezaba: "Cuidado, los caballos pueden patearte o morderte". Al infringir esta advertencia, se posó a su lado y de inmediato el animal le mordió el brazo derecho bruscamente.

Al sufrir el ataque, la mujer de gorra y remera de Pink Floyd gritó debido al dolor. Incluso el caballo la arrastró con fuerza unos centímetros hasta que logró soltarse. En ese instante caminó hasta el contingente de turistas de su nacionalidad y relató lo que sentía.

Lo cierto es que, mientras el resto de los presentes grababa esa situación, ella se descompensó y cayó repentinamente al suelo. Gracias a la ayuda de sus compañeros, se corrió hacia las vallas que rodean al palacio y se recompuso del susto.