EFE, AFP
El ministro de Exteriores de Ucrania, Andrí Sibiga, expresó su confianza en que Brasil pueda ejercer su “influencia diplomática” para persuadir a Rusia de firmar un acuerdo de “paz justo” que incluya un paquete de “garantías de seguridad”.
“Contamos con el apoyo de Brasil en nuestros esfuerzos por lograr una paz justa y completa en Ucrania. Brasil tiene influencia sobre Rusia”, afirmó en una entrevista divulgada ayer sábado por el diario Folha de São Paulo.
El jefe de la diplomacia ucraniana manifestó que “es la hora de la diplomacia” y, en este sentido, considera que “el apoyo de un país como Brasil es realmente crucial e importante”.
En una rueda de prensa en Hanoi, al término de una visita oficial a Vietnam, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, anticipó que hablará por separado con los mandatarios de Rusia y Ucrania, Vladímir Putin y Volodímir Zelenski, sobre la necesidad de negociar el fin de una guerra que se extiende desde hace tres años.

Lula tiene previsto viajar a Moscú en mayo próximo para acudir a las conmemoraciones del 80 aniversario del final de la II Guerra Mundial.
Además, pretende invitar a Putin a la cumbre del grupo BRICS que se celebrará en Río de Janeiro a comienzos de julio, aunque es poco probable que el líder ruso viaje a Brasil debido a la orden de arresto dictada en su contra por la Corte Penal Internacional como consecuencia de la invasión de Ucrania.
En este marco, Sibiga definió a Brasil como un país “con profundas tradiciones diplomáticas, que sabe presionar a terceros”.
Brasil ha condenado en numerosas ocasiones la invasión de Ucrania por parte de Rusia, pero ha despertado el escepticismo de buena parte de los países occidentales y de la propia Ucrania por la propuesta de paz que presentó en 2024 en asociación con China.
Esa iniciativa, que no condena al país invasor y se refiere a la guerra de Ucrania como una “crisis”, ha sido criticada por algunos países que señalan que se alinea con los intereses de Moscú. No obstante, Sibiga afirmó ahora a Folha de São Paulo que esa iniciativa no contradice la fórmula de paz planteada por Zelenski.

“Hay muchos elementos similares. Saludamos todos los esfuerzos de los países que nos apoyan para lograr una paz justa”, apuntó.
Sibiga señaló que tiene “contactos constantes” con su homólogo brasileño, Mauro Vieira, a quien han trasladado el interés de Zelenski de visitar Brasil y expresado que recibirían “con satisfacción” al presidente Lula en Ucrania.
También propuso a Brasil estrechar lazos en materia de Defensa, en concreto en la producción de drones, que podrían adaptarse para impulsar la ya potente industria agropecuaria brasileña.
En una rueda de prensa en Hanoi, al término de una visita oficial de tres días a Vietnam, el presidente Lula da Silva dijo que devolver la paz a Ucrania será “lo mejor” para ambos países, pero también para Europa y el resto del mundo. “En un conflicto ambas partes deben estar dispuestas a negociar”, remarcó.
“La paz destruye y la paz construye (...) voy a conversar eso otra vez con Putin”, agregó.
Asimismo, afirmó que mantendrá una nueva conversación telefónica con Zelenski “esta semana”, sin precisar el día en que se llevará a cabo esta llamada.

Estados Unidos
La semana pasada, Estados Unidos emitió dos comunicados separados sobre los contactos que mantuvo con Rusia y con Ucrania del 23 al 25 de marzo en la capital saudí, en el marco de unas negociaciones para un eventual fin del conflicto.
Las partes, que siguen atacándose, acordaron garantizar una navegación segura, eliminar el uso de la fuerza y evitar buques comerciales con fines militares en el mar Negro, así como desarrollar medidas para prohibir los ataques contra las instalaciones energéticas en ambos países. A pesar del inmenso coste de la invasión rusa, la mayoría de los ucranianos son partidarios de resistir antes que rendirse en caso de que Washington le retire totalmente el apoyo, siempre que Europa se mantenga de su lado, según una encuesta del Instituto Internacional de Sociología de Kiev (KIIS).
La visita de Lula a Japón y Vietnam
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, realizó una visita de Estado de tres días (de jueves a ayer sábado) a Vietnam, quinto mayor consumidor de los productos agropecuarios brasileños en el mundo, en búsqueda de nuevos negocios y en defensa del multilateralismo.
Lula, que viene de otra parada oficial de tres días en Japón, tenía previsto negociar e incluso acordar con Vietnam que Brasil le pueda vender más carne, así como los aviones de Embraer, y para ampliar las ventas de etanol. En Tokio, Lula criticó la política arancelaria del presidente estadounidense, Donald Trump, de quien dijo hoy que “no es el sheriff del mundo”. EFE

Unos 170 drones contra zonas ucranianas
Ucrania acusó ayer sábado a Rusia de sabotear con sus ataques contra la población civil los intentos de paz en Ucrania, mientras Moscú y Kiev siguen acusándose mutuamente de violar una tregua energética que ambas partes han declarado en sus contactos con Estados Unidos sin condiciones específicas ni mecanismos de verificación. “Rusia se burla de los esfuerzos de paz del mundo, prolonga la guerra y perpetra este terror porque no siente una presión real”, escribió Zelenski en Telegram sobre el ataque ruso del viernes contra Dnipró, en la región de Dnipropetrovsk, que dejó cuatro muertos y 24 heridos. Agregó que los socios de Ucrania “saben qué puede ayudar, qué tipo de presión” y subrayó que “eso depende de EE.UU., de Europa, de todos los que en el mundo quieren una diplomacia eficaz”. Recordó que el viernes y sábado Rusia atacó las regiones de Dnipropetrovsk, Kiev, Sumi, Járkov y Jmelnitski con más de 170 drones, entre ellos más de 100 aviones no tripulados de ataque Shahed.
En tanto, Rusia afirmó ayer que las Fuerzas Armadas de Ucrania “han aumentado los ataques a la infraestructura energética en las regiones rusas de Kursk y Bélgorod”. EFE