ARGENTINA
Como vicepresidenta electa la libertad de Cristina está casi asegurada mientras el peronismo mantenga su mayoría en el Congreso.
La Cámara Federal confirmó el procesamiento de Cristina Fernández de Kirchner en la causa por cartelización de obras públicas viales, un expediente derivado del caso de los cuadernos de las coimas, con más de cien imputados por el pago de sobornos para la distribución de contratos de obras viales a empresas constructoras.
En cambio, la Cámara Federal revocó los procesamientos de Cristina en las causas por irregularidades en la renegociación de los contratos de corredores viales y en la conocida como Gas Natural Licuado. En ambas le dictó la falta de mérito. El Gas Natural Licuado es considerada “causa madre” de los cuaderos de las coimas. La investigación judicial busca determinar si se pagaron sobreprecios por los contratos de importación. Bonadio había procesado a Cristina en este expediente como jefa de una asociación ilícita, pero ahora quedó por fuera de ese esquema y recibió la falta de mérito.
En el caso de la adjudicación de obra pública, el expediente surgió, en gran parte, a partir de la lista aportada por Clarens, el hombre detrás de las finanzas de los Kirchner, que cuando se presentó como arrepentido en el expediente de los cuadernos de las coimas entregó planillas con registros de pagos ilícitos por parte de empresas.
El juez de primera instancia, Claudio Bonadio, evaluó esas planillas en relación a listados aportados por la Oficina Anticorrupción y la DNV y reconstruyó cómo era el esquema recaudatorio. Bonadio había procesado a Cristina como jefa de una asociación ilícita bajo el supuesto de que, desde su cargo como presidenta de la Nación no podía estar ajena a las maniobras de recaudación.
Clarens había apuntado sobre un grupo de empresarios como quienes pagaban habitualmente sobornos para quedarse con contratos de obra pública que administraba el Ministerio de Planificación Federal que manejaba De Vido.
El fallo firmado por los jueces Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi dejó procesada a la expresidenta, así como también a los exfuncionarios José López, Julio De Vido, Nelson Periotti, Sandro Férgola, Hernán Passacantando y Germán Nivello.
También quedaron procesados por cohecho activo los empresarios Ángelo Calcaterra, Carlos Wagner (Esuco y Cámara Argentina de la Construcción), Gerardo Ferreyra (Electroingeniería), Aldo Roggio (Grupo Roggio), Héctor Sánchez Caballero (Iecsa), Hugo Dragonetti (Panedile), Cristóbal López y Fabián De Sousa (CPC) y Juan Chediak (Cámara Argentina de la Construcción).
En el caso de los empresarios Lázaro Báez y Hugo Eurnekian, la Cámara consideró que no hay elementos suficientes para que estén procesados y se les dictó la falta de mérito.
Como vicepresidenta electa la libertad de Cristina está casi asegurada mientras el peronismo mantenga su mayoría en el Congreso.
La detención de una vicepresidenta en ejercicio solo puede ocurrir después de un juicio político en el Congreso que la destituya de ese cargo. La ley de Fueros establece que en el caso del presidente o vice no alcanza solo con el desafuero (como ocurre con los legisladores), sino que estos funcionarios tienen que ser removidos de sus cargos mediante un juicio político antes de ser detenidos. Las causales para iniciar un juicio político contra una vicepresidenta incluyen conductas que justifiquen un mal desempeño, la comisión de un delito durante el ejercicio de su cargo o la comisión de un delito fuera del cargo que ejerce en ese momento. El juicio político incluye la aprobación en comisión y luego la votación en el recinto en Diputados.
Fernández pide unidad para eliminar el hambre
Alberto Fernández, pidió unidad para que en el país “nadie más pase hambre”, durante su primera intervención desde las elecciones.
“Vamos a remangarnos todos para que en Argentina nadie más pase hambre”, sostuvo durante su intervención en la norteña provincia de Tucumán, donde participó en la investidura del gobernador Juan Manzur, también peronista y que asume su segundo mandato.
Culpó a la gestión de Mauricio Macri por la situación del país y el aumento de la pobreza.
“El mayor daño que han hecho todo este tiempo fue condenar a la pobreza a 4 de cada 10 argentinos. Por primera vez en mucho tiempo volvimos a escuchar la palabra hambre entre nosotros”, agregó.
Las últimas cifras del Instituto Nacional de Encuestas y Censo, indican que el 35,4% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza, lo que representa un 25,4% de los hogares, mientras que la tasa de indigencia es de 7,7%.
Fernández apuntó a realizar la mayor “epopeya” en la historia del país y terminar con esta problemática, ya que una sociedad “no puede sentirse digna si en su seno hay hombres y mujeres que pasan hambre”. (Fuete: EFE)
Alberto Fernández construyó el triunfo que lo convirtió en el futuro presidente de la Argentina en la vasta geografía del conurbano bonaerense (la zona que bordea a la ciudad de Buenos Aires) donde aventajó a Mauricio Macri por 1.556.459 votos según el escrutinio provisional. En todo el país, la diferencia es apenas mayor: 2.003.100 votos.
El vendaval de votos del Frente de Todos se sintió especialmente en la Tercera Sección Electoral de la provincia, mayormente el sur del Gran Buenos Aires, donde Fernández más que duplicó a Macri (2.015.563 a 955.878). Algo más pareja resultó la disputa en la Primera Sección -norte y oeste-, donde aun así el kirchnerismo le sacó 570.000 votos a Juntos por el Cambio.
En esas dos inmensas aglomeraciones que concentran casi el 25% del padrón nacional, el Frente de Todos sostuvo su posición dominante respecto de las primarias y el repunte de Macri fue muchísimo menor que en el resto del país. En los 24 municipios que integran el Gran Buenos Aires (conforman el grueso de las secciones Primera y Tercera), Fernández obtuvo el 77% de la diferencia nacional sobre Macri. En las primarias había sido el 44%.
Esos distritos estuvieron excluidos de la gira presidencial del #Sí, se puede, eje de la campaña por la reelección. En los despachos del oficialismo saliente se preguntan qué hubiera pasado si no se hubiera dado por perdido el conurbano en el diseño de la estrategia proselitista. “Donde escondimos a Macri terminamos perdiendo la elección”, se lamentaba un ministro del Gobierno.
Alberto Fernández se fortaleció en municipios castigados por la crisis económica, donde la imagen de Macri cayó sostenidamente desde al menos el segundo semestre de 2018. Se trata del territorio en el que se refugió Cristina Fernández de Kirchner para resistir los años en el llano y donde se asienta la base de poder de la vicepresidenta electa.
La participación fue alta en las dos secciones electorales que abarcan el conurbano. Llegó a 82,55% en la Primera y a 82,93 en la Tercera. En el total país, la cifra llegó a 80,86%. (Con información de La Nación-GDA)