Publicidad

Renuncia rectora en prestigiosa universidad de EE.UU. por polémica sobre antisemitismo

Críticas a las políticas de las universidades Harvard, MIT y Penn.

Compartir esta noticia
Magill. La ex rectora de Penn en la audiencia del Congreso.
Magill. La ex rectora de Penn en la audiencia del Congreso.
Foto: AFP

AFP, EFE
De las tres rectoras de prestigiosas universidades de Estados Unidos que comparecieron ante una comisión del Congreso hace una semana para hablar del antisemitismo en sus instituciones, una renunció luego de las polémicas declaraciones que hicieron ante los legisladores.

La rectora de la Universidad de Pensilvania (Penn), Elizabeth Magill, “presentó voluntariamente su renuncia”, anunció el presidente de la junta directiva de la universidad, Scott Bok, el pasado sábado. Bok también renunció.

Magill fue una de las tres rectoras de universidades de élite que enfrentaron feroces críticas por su testimonio el martes pasado durante una audiencia en el Congreso sobre antisemitismo.

El trío dio respuestas tortuosas, legales y aparentemente evasivas en la audiencia cuando se les preguntó si los estudiantes que llaman al “genocidio de judíos” en sus recintos violan los códigos de conducta estudiantil.

A una pregunta de la legisladora Elise Stefanik, republicana por el estado de Nueva York, sobre si “llamar al genocidio de judíos viola las reglas o el código de conducta de Penn”, Magill se negó a decir claramente que los cánticos antisemitas y los llamamientos al genocidio del pueblo judío violan el código de conducta de la escuela.

“Si el discurso se convierte en conducta, puede ser acoso. Sí”, respondió Magill y añadió que “es una decisión que depende del contexto”.

La rectora de Harvard, Claudine Gay, respondió al cuestionamiento de Stefanik en términos similares y dijo que cuando “el discurso se convierte en conducta, eso viola nuestras políticas”.

Por su parte, la rectora del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), Sally Kornbluth, dijo que no había oído hablar de estudiantes en su campus que pidieran el genocidio de judíos, y añadió que esa retórica sería “investigada como acoso si es generalizada y grave”.

Las reacciones fueron rápidas e intensas: 74 legisladores escribieron cartas exigiendo la destitución inmediata de las tres rectoras.

Y la viceportavoz de prensa de la Casa Blanca, Andrew Bates, emitió un comunicado en el que lamentaba que las rectoras universitarias no criticasen más al antisemitismo.

Gay se disculpó después por no condenar con más firmeza las amenazas de violencia antisemita en su campus.

Magill enfrentó críticas aún más mordaces. El gobernador demócrata de Pensilvania calificó su desempeño de “absolutamente vergonzoso”, y un donante dijo que rescindiría una donación de 100 millones de dólares a la Escuela de Negocios Wharton de la universidad.

A través de un vídeo publicado en redes sociales, Magill se justificó y condenó los llamamientos al genocidio del pueblo judío. “No me centré, pero debería haberlo hecho, en el hecho irrefutable de que un llamado al genocidio del pueblo judío es un llamado a algunas de las violencias más terribles que los seres humanos pueden perpetrar”, afirmó Magill, que seguirá como docente en la facultad de Derecho de Penn.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad