GUERRA EN UCRANIA
Zelenski dijo el lunes que la Navidad y el Año Nuevo es tiempo de “paz y no de agresión”. El Kremlin, sin embargo, respondió que primero Ucrania debe “aceptar la realidad” sobre el terreno.
El Kremlin descartó ayer martes la retirada de tropas rusas este año, con lo que respondió a una propuesta del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que llamó a a Rusia a hacerlo para Navidades. “De eso no se puede ni hablar”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
Zelenski dijo el lunes que la Navidad y el Año Nuevo es tiempo de “paz y no de agresión”. Zelenski dijo el lunes que la Navidad y el Año Nuevo es tiempo de “paz y no de agresión”. “Propongo que Rusia al menos intente demostrar que es capaz de rechazar la agresión”, indicó en un mensaje a los líderes del G7.
Según Zelenski, “sería correcto que esta Navidad comenzara con la retirada de las tropas rusas del territorio internacionalmente reconocido como Ucrania”.
El mandatario aseguró que con este paso Moscú “garantizará el cese fiable de las hostilidades”.
Sin embargo, el Kremlin respondió que primero Ucrania debe “aceptar la realidad” sobre el terreno.
Peskov dijo que “estas realidades hablan de que la Federación Rusa tiene nuevos sujetos a raíz de los referéndum que se realizaron en los territorios” de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, anexionados en septiembre pasado.
“Sin tener en cuenta estas nuevas realidades, cualquier progreso es imposible”, zanjó el representante de la Presidencia rusa.
La decisión rusa de anexar esos territorios no es reconocida por la comunidad internacional.
Peskov también comentó los “tres pasos” propuestos por Zelenski para alcanzar la paz en Ucrania, que prevén mayores entregas de armas a Kiev, la preservación de la ayuda económica y financiera, y el uso de la diplomacia para la liberación de los territorios ucranianos.
“Son tres pasos para continuar acciones militares”, dijo el portavoz ruso.
El lunes en su mensaje al G7, el presidente ucraniano reiteró su plan de paz en 10 puntos presentado a mediados de noviembre, que versa sobre el restablecimiento de la integridad territorial, la suerte de los prisioneros o la seguridad alimentaria.
El ejército ucraniano ha hecho retroceder a las tropas rusas en los últimos meses. En respuesta, Moscú ha movilizado a 300.000 reservistas para consolidar sus líneas defensivas y lleva a cabo ataques contra las infraestructuras energéticas del país.
San Petersburgo
La antigua capital zarista, San Petersburgo, anunció que reforzará las medidas de seguridad de cara a las fiestas navideñas por temor a atentados terroristas.
“En condiciones de aumento de la amenaza de sabotajes y atentados, las autoridades refuerzan la defensa antiterrorista de las infraestructuras urbanas”, dijo Alexandr Beglov, gobernador de la segunda ciudad más grande de Rusia.
Por ello, se han tomado medidas adicionales en el transporte público, escuelas, guarderías, hospitales y en plazas y lugares públicos donde se congrega la gente.
También se protegerán empresas y fábricas, la infraestructura energética e industrial, y las instalaciones nucleares.
Después de Moscú y Sochi a orillas del mar Negro, San Petersburgo es el tercer destino preferido por los rusos para las fiestas de Año Nuevo.
En esta ocasión, las autoridades de la ciudad decidieron reducir al mínimo las celebraciones y recaudar dinero para los combatientes y sus familias.