Enviada a Buenos Aires
El 17 de octubre de 2022, el kirchnerismo concentraba a miles en la Plaza de Mayo, con Máximo Kirchner como principal orador de un acto por el Día de la Lealtad Peronista. Alberto Fernández inauguraba una autopista en las afueras de la ciudad, rodeado de sus ministros más fieles. Por otro lado, los sindicatos agrupados en la CGT montaban un acto también lejos del centro. Así, con tres celebraciones por separado, quedaba en evidencia la profunda fractura del gobierno. Ayer, 17 de octubre de 2023, en un nuevo Día de la Lealtad, Sergio Massay Axel Kicillof cerraron la campaña de Unión por la Patria en el partido bonaerense de Avellaneda, apelando más que nunca a la unidad bajo el paraguas de Unión por la Patria. La CGT estaba presente; Máximo, en primera fila. No estaban Cristina ni el presidente.

“El domingo, el deseo se va a hacer realidad”, sentenció el ministro-candidato ante unas 40.000 personas que colmaron el estadio de Arsenal de Sarandí y las manzanas aledañas. Massa apuesta todo a la primera vuelta; lo mismo Kicillof, gobernador de la Provincia de Buenos Aires.

Foto: AFP

Avellaneda, el lugar elegido para dirigirse a su militancia, es un bastión peronista. Al entrar en este partido, ubicado a unos 7 kilómetros al sur del centro de la capital, se leen pintadas de La Cámpora contra Clarín -”Kirchner o mascota de Clarín”-, y la cara de Kicillof está mucho más presente que la de Néstor Grindetti (Juntos por el Cambio) y Carolina Píparo (La Libertad Avanza). En este terreno, Unión por la Patria arrasó en las PASO presidenciales. Massa obtuvo el 26,49% de los votos y Juan Grabois se llevó el 11,2%. Javier Milei sacó un décimo menos que Grabois, el quinto candidato más votado a nivel nacional.

Massa fue breve y contundente. Con ese empuje popular, polarizó con Milei sin nombrarlo al cuestionar a los que quieren “regalar vouchers” para acceder al sistema educativo. “Creemos en la protección social como valor del Estado presente y eficiente”, resaltó el candidato.

Kicillof, que habló antes que Massa, también se refirió veladamente al libertario. “Proponen exterminar al peronismo y a la justicia social. ¿Qué democracia es esa, donde proponen con odio y con violencia, cuyo extremo fue el atentado a la vida de Cristina y que siguió con la proscripción de Cristina?”, apuntó, y se llevó una ovación extendida.

En otro tramo del discurso, Massa volvió a salir al cruce de Milei y también de Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio). “Tuvimos que escuchar en esta campaña como dos candidatos lastimaban a las familias cuyos seres queridos derramaron su sangre en las Malvinas”, dijo. “No regalamos la sangre de nuestros soldados, no resignamos a Malvinas y a la Antartida como parte de nuestro proyecto de Nación”.

El ministro agradeció la gestión de Kicillof, y dijo que “gran parte del triunfo del domingo” será por lo hecho en la provincia de Buenos Aires. Además, nombró la seguridad como uno de los ejes centrales de su eventual gobierno, al mismo nivel que la inflación y el empleo. “Me van a tener al lado trabajando, codo a codo, porque quiero que la defensa de la vida y de la paz sean valor que representen a Unión por la Patria”, aseguró el candidato frente a cientos de banderas de las distintas agrupaciones peronistas, entre las que destacaban el Movimiento Evita y La Cámpora. Al terminar, Massa convocó, una vez más, a un gobierno “de unidad nacional”. Y para cerrar, citó una frase célebre de Juan Domingo Perón: “Para un argentino no hay nada mejor que otro argentino”.