O Globo/GDA
Las imágenes de las cámaras de seguridad registraron el momento exacto en que las enfermeras de un hospital de Taiwán se movilizaron para salvar a más de diez bebés recién nacidos durante el terremoto que azotó el país este miércoles. Los temblores alcanzaron más de siete grados y dejaron al menos diez muertos y más de mil heridos.
En el vídeo, se puede ver a cuatro miembros del personal de maternidad tratando de mantener quietas las incubadoras en el centro de la habitación mientras todo el edificio comienza a temblar agresivamente. Al personal le preocupaba que una ventana cercana pudiera romperse y herir a los bebés.
WATCH: Brave nurses shield newborns during the 7.4 magnitude earthquake that struck Taiwan’s east coast on April 3. pic.twitter.com/ZmItyKM0Xa
— AccuWeather (@accuweather) April 4, 2024
Un terremoto histórico
Calculado con una potencia de magnitud 7,4 por el Centro Geológico de Estados Unidos, el terremoto fue el más potente que sacudió Taiwán desde 1999, cuando un temblor de magnitud 7,6 provocó 2.400 muertos.
El terremoto provocó daños en varios edificios, así como una alerta de tsunami en la costa este de Asia, que fue levantada al cabo de unas horas. Todas las muertes se produjeron en el condado de Hualien, al este de la isla, donde los medios locales mostraron imágenes de varios edificios peligrosamente inclinados. En Nuevo Taipei, al norte, un almacén se derrumbó y 60 personas fueron sacadas de entre los escombros, según el gobierno local.
El terremoto se sintió en todo Taiwán y se registraron varias réplicas, incluida una de magnitud 6,5 cerca de Hualien, según la agencia meteorológica de la isla.
En la capital, Taipei, el tráfico del metro estuvo suspendido durante casi una hora y se pidió a los residentes que comprobaran posibles fugas de gas. El fabricante taiwanés de semiconductores TSMC, el mayor del mundo, detuvo durante unos minutos la producción de algunas unidades.
El temblor se sintió al otro lado del Estrecho de Taiwán, en la región de Fujian en China continental, así como en la ciudad semiautónoma de Hong Kong.
En Japón, las autoridades suspendieron temporalmente el tráfico aéreo en el aeropuerto de Naha, en la isla de Okinawa. Un portavoz del gobierno japonés dijo que no se reportaron víctimas en la región. La agencia meteorológica japonesa detectó subidas del nivel del mar de hasta 30 centímetros en algunas islas.