Termina operación antiterrorista en Yenin, un bastión histórico de grupos armados palestinos en Cisjordania

El ejército de Israel se retira tras matar a 14 terroristas y destruir instalaciones subterráneas de armas. Además de logró la detención de más de 30 sospechosos.

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Yenín. Campamento de refugiados y bastión de varios grupos armados palestinos en Cisjordania.
Yenín: Campamento de refugiados y bastión de varios grupos armados palestinos en Cisjordania.
Foto: EFE

EFE, AFP
Las tropas israelíes se retiraron ayer viernes de la ciudad y del campamento de refugiados de Yenín, al norte de la Cisjordania, tras diez días de incursión. El Ejército israelí dijo en un comunicado que en estos últimos días de incursión en Yenín eliminaron a 14 terroristas y detuvieron a más de 30 sospechosos.

“Se desmantelaron numerosos sitios de infraestructura terrorista, incluida una instalación subterránea de almacenamiento de armas ubicada debajo de una mezquita”, indican en el texto. Y advierten que “las fuerzas de seguridad israelíes continúan actuando para lograr los objetivos de la operación antiterrorista”.

El pasado 28 de agosto el Ejército lanzó en Yenín, y también en las norteñas Tulkarem y Tubas, todas bastiones históricos de milicias palestinas, una operación antiterrorista bautizada por Israel como “Campamentos de Verano”.

Las fuerzas israelíes irrumpieron de forma simultánea con tropas, tanques y excavadoras e incluso drones explosivos con el objetivo de desmantelar las redes terroristas de Hamás y de la Yihad Islámica.

La incursión en Yenín se ha convertido en una de las más largas de la historia del Ejército israelí tras prolongarse diez días consecutivos.

Yanín es un bastión histórico de grupos armados palestinos en el norte de Cisjordania. En su campamento de refugiados viven unas 14.000 personas, descendientes de palestinos desplazados tras la creación de Israel en 1948, y la mayoría son jóvenes sin empleo.

En los últimos años, una nueva generación de palestinos se han sumado como milicianos a la Brigada Yenín, una amalgama no sofisticada ni muy coordinada que incluye miembros de Hamás, la Yihad Islámica Palestina y los Mártires de Al Aqsa de Fatah.

Residentes caminan en medio de la destrucción tras una incursión militar israelí en el campo de refugiados de Jenin.
Residentes caminan en medio de la destrucción tras una incursión militar israelí en el campo de refugiados de Jenin.
Foto: AFP

Muerte en Cisjordania

Una activista estadounidense con nacionalidad turca murió ayer viernes tras recibir una herida de bala durante una manifestación en Cisjordania en una localidad donde el ejército israelí reconoce que abrió fuego.

Un hospital de Naplusa, en el norte de Cisjordania, anunció la muerte de la activista estadounidense propalestina de 26 años, que fue ingresada con un balazo en la cabeza en la localidad de Beita

La joven, que también tenía nacionalidad turca, fue identificada como Aysenur Ezgi Eygi.

Según la agencia oficial de noticias palestina, Wafa, la joven fue alcanzada por un disparo de un soldado israelí.

El ejército israelí afirmó que sus fuerzas que se encontraban cerca de Beita “respondieron disparando en dirección al principal instigador de la violencia, que había lanzado piedras contra los (soldados) y suponía una amenaza para ellos” y añadió que está “investigando” los “detalles del incidente”.

La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó que el gobierno está “profundamente consternado” por la muerte de una ciudadana estadounidense.

“Hemos contactado al gobierno de Israel para pedir más información y solicitar una investigación”, añadió.

Eygi pertenecía al Movimiento Internacional de Solidaridad (ISM), una organización propalestina, y estaba en Beita para participar en una protesta contra las colonias israelíes, indicó Neta Golan, cofundadora del grupo.

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, condenó la “salvaje intervención de Israel” en la manifestación.

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