Diez personas murieron y al menos otras 10 resultaron heridas en un tiroteo en una localidad de población mayoritariamente asiática del sur de California, dijo la policía ayer. El atacante abrió fuego en un salón de baile en Monterey Park, cerca de Los Ángeles, mientras la comunidad local celebraba el Año Nuevo Lunar, y testigos dijeron que disparó indiscriminadamente con un arma semiautomática.
Andrew Meyer, de la oficina del Sheriff del condado de Los Ángeles, indicó a periodistas que policías respondieron a las llamadas de emergencia en la noche del sábado y cuando llegaron encontraron personas saliendo de la discoteca. Al ingresar al lugar, 10 personas fueron declaradas muertas y al menos 10 víctimas adicionales debieron ser llevadas a varios hospitales locales, donde permanecen en condiciones desde estable hasta grave.
Horas después, la Policía indicó que ha localizado y acorralado al posible sospechoso en Torrance, también en el condado de Los Ángeles, quien estaba en una furgoneta blanca que coincide con el vehículo sospechoso citado por algunos testigos. “No conocemos su estado, pero vamos a manejar esto de la manera más segura posible para tratar de identificar a esa persona. ¿Podría ser nuestro sospechoso? Posiblemente, pero en este punto, si hacemos nuestro trabajo correctamente, no solo analizamos esa situación o escenario, sino que nos aseguramos de que examinamos todas y cada una de las posibilidades”, dijo el comisario Robert Luna.
En una comparecencia anterior las autoridades indicaron que buscaban como sospechoso a un hombre asiático, que según los testigos tenía entre 30 y 50 años de edad. En la foto distribuida aparece con una chaqueta de piel, gafas y gorro y se advertía de que debía considerarse como “armado y peligroso”.
La Policía cree que el tiroteo está relacionado con un incidente ocurrido poco después en el vecino suburbio de Alhambra, al norte de Monterey Park, también en una sala de baile y en el que los presentes lograron desarmar al agresor, que se cree que fue el mismo del tiroteo anterior y que huyó sin disparar.
Monterey Park, a unos 13 kilómetros al este del centro de Los Ángeles, es hogar de unas 61.000 personas, la mayoría asiáticas o asiático-estadounidenses.
Acción de Biden
El presidente Joe Biden recibió información sobre los asesinatos en Monterey Park y ordenó al FBI que brinde “apoyo total” a las autoridades locales, tuiteó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre. Wong Wei, que vive en la zona de Monterey Park, le dijo al diario Los Angeles Times que una amiga suya había ido a esa discoteca y estaba en el baño cuando comenzaron los disparos.
Cuando salió, vio a un hombre que portaba un arma larga y disparaba indiscriminadamente, así como los cuerpos de tres personas, dos de ellas mujeres y el otro de alguien que identificó como el jefe de la discoteca.
El periódico informó que Seung Won Choi, dueño de una marisquería cerca del lugar de la matanza, dijo que tres personas entraron corriendo a su restaurante y le dijeron que cerrara la puerta con llave. Los tres dijeron que había un hombre con un arma semiautomática que tenía varias rondas de municiones y que recargaba cada vez que se le acababa, dijo Choi al diario.
Decenas de miles de personas se habían reunido más temprano ese día para las festividades de dos días del Año Nuevo chino, que se encuentran entre las más grandes del sur de California.
Los detectives aún no saben si el sospechoso conocía a sus víctimas, y que era demasiado pronto en la investigación para saber si este incidente fue un crimen de odio.
La violencia armada es un problema en Estados Unidos, donde se produjeron 647 tiroteos masivos en 2022, definidos como incidentes con cuatro o más personas baleadas o muertas, sin incluir al atacante.
Foto: AFP