Agencia EFE
Pablo Iglesias, fundador de la agrupación de izquierda española Podemos, dio un giro radical a su carrera y abandonó la política para dedicarse a la gastronomía. Así es que abrió su propio bar, la Taberna Garibaldi, en el barrio de Lavapiés en Madrid.

"Todavía estoy un poco nervioso porque los estrenos son difíciles", sostuvo Iglesias en un video publicado en la red social X del bar, mientras secaba unos cubiertos. "Hoy llamaron unas señoras para reservar, he cogido el teléfono para tomarles nota, y me han reconocido. Una risa", agregó.

Toda la estética del local gastronómico está rodeada de guiños a las figuras de izquierda tanto de España como de todo el mundo. En el menú se puede leer la frase "las tabernas son el último bastión de la libertad del proletariado", junto a una ilustración del filósofo marxista Karl Kautsky; y el bar ofrece tragos con nombres como "Evita Martini", "Gramsci Negroni", "Che daiquiri" y "Fidel Mojito".

La oferta de platos continúa con la misma línea, con platos como "Salmajero Partisano" o "Brigada Garibaldi". También hay una sección dedicada a las opciones veganas, bajo el nombre "No me llame ternera", que coincide con el título del documental acerca del miembro de ETA Josu Urritikoetxea.

Para indicar que el bar está por cerrar sonará la canción "Bella Ciao", internacionalmente conocida como un himno de resistencia antifascista. De acuerdo al medio Huffingtonpost, los cocktails tendrán un precio de 9 euros ($375, aproximadamente), mientras que las cervezas costarán 3 euros ($125). En cuanto a la comida, las entradas oscilarán entre los 7 ($292) y los 11 euros ($459), y los platos principales entre los diez ($417) y los doce euros ($501).