El alto al fuego en Gaza, con intercambio de rehenes, se convertirá en realidad mañana. La aprobación del gobierno de Benjamín Netanyahu, un paso político vital para la efectivización del acuerdo, llegó en la madrugada de hoy sábado en Israel, tras cinco horas de debate. En teoría, si todo sale como se espera, Israel dejará de bombardear Gaza y se liberarán los primeros rehenes en el mediodía del domingo.

El pacto, anunciado el jueves por Catar, uno de los mediadores entre el Estado judío y la organización terrorista Hamás, recibió 24 votos a favor y ocho en contra. Además de los ministros de los dos partidos ultranacionalistas (Sionismo Religioso y Poder Judío), se opusieron dos del Likud, la formación de Netanyahu.

El camino a la votación del gabinete se despejó ayer, cuando la oficina de Netanyahu señaló que su delegación en Doha y la de Hamás habían firmado el documento tras solventar diferencias de última hora.

“El gobierno (de Israel) ha aprobado el marco para la devolución de los rehenes (...) entrará en vigor el domingo 19 de enero de 2025”, indicó la Oficina del primer ministro en un comunicado a altas horas de la madrugada israelí.

De su parte, el gabinete de seguridad aseguró que el acuerdo “sustenta la consecución de los objetivos de la guerra”.

El acuerdo entra en vigor con una primera fase que se extenderá por un periodo de 42 días, en los que se dará luz verde para la entrada de ayuda humanitaria y combustible a toda la Franja de Gaza y la rehabilitación de hospitales -los que todavía funcionan, lo hacen parcialmente-.

Foto: AFP

En esta primera fase, Hamás liberará a un total de 33 rehenes israelíes a cambio de la excarcelación por Israel de presos palestinos.

Son mujeres, hombres mayores de 50 años y aquellos considerados “humanitarios”, como menores y personas enfermas. Entre los cautivos en Gaza desde hace más de un año se encuentran dos niños de dos y cinco años junto a sus padres, además de tres personas mayores de 80 años.

Según la agencia AFP, que cita dos fuentes cercanas a Hamás, el primer grupo de rehenes que será liberado debería estar compuesto por “tres mujeres soldados israelíes”.

No se sabe con certeza cuántos de los rehenes están con vida. Las familias de los rehenes ya fueron informadas y se están ultimando los preparativos para recibirlos.

En tanto, el Ministerio de Justicia de Israel publicó la lista de los primeros 95 presos que serán liberados: mujeres y menores de 19 años, ya que la ley militar israelí permite encarcelar a menores de incluso 12 años.

En total, el número de presos palestinos excarcelados dependerá de cuántos rehenes estén con vida y oscilará entre casi 1.000 y 1.650.

Durante el desarrollo de estas acciones, las partes concretarán los detalles de una segunda y tercera fase.

El final definitivo de la guerra será negociado durante esta primera etapa, que se extenderá por un mes y medio. Además, Israel llevará a cabo en este lapso de tiempo una retirada paulatina de sus fuerzas en Gaza y autorizará el retorno de los desplazados del norte de la Franja a sus viviendas, siempre que aún se mantengan en pie.

Foto: AFP

Antes del inicio de la tregua, desplazados palestinos se preparan ya para volver a sus casas. “Voy a besar mi tierra. Lamento haberla dejado. Si hubiera muerto en mi tierra, hubiera sido mejor que ser un desplazado aquí”, asegura Nasr al Gharabli que huyó de ciudad de Gaza, en el norte, hacia un campo de refugiados más al sur. En Deir el Balah, Fatima Moqat expresa el dolor por los muertos.

“Gaza fue destruida y reconstruida cien veces antes (...) Las casas pueden ser reemplazadas, pero las personas no”, dijo a AFP.

Por su parte, las autoridades israelíes tomaron medidas para “prevenir cualquier manifestación pública de alegría”, cuando los palestinos presos en Israel sean excarcelados. El general Kobi Yakobi, jefe del servicio penitenciario, “dio instrucciones para prevenir cualquier manifestación pública de alegría” en Ascalón y otras zonas de Israel.

El pasado 14 de enero, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció que entregará a la próxima Administración de Donald Trump un plan posguerra para la Franja de Gaza, el cual incluye un gobierno unitario con Cisjordania supervisado por la comunidad internacional.

Bajo esa propuesta, la comunidad internacional ayudará a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) a “establecer un gobierno interino” en Gaza con responsabilidad sobre el acceso al agua, la energía y la salud, elegido por “consulta” popular y que acabará entregando el poder a una ANP “reformada tan pronto como sea posible”, detalló Blinken.

Tras la toma militar de Rafah el pasado 7 mayo, Israel controla todos los puntos de acceso a Gaza, gobernado de facto por Hamás desde 2007. (Con información de EFE, AFP y El País de Madrid)

Foto: AFP

Foto: AFP

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, afirmó ayer que la entidad está lista para asumir “toda la responsabilidad” en Gaza después de la guerra, en su primera declaración desde que se anunciara el acuerdo. “El gobierno palestino, bajo las directrices del presidente Abás, completó todos los preparativos para asumir toda la responsabilidad en Gaza”, incluido el retorno de los desplazados, la prestación de servicios básicos, la gestión de los pasos fronterizos y la reconstrucción del territorio devastado por la guerra, según un comunicado de su oficina.

Mientras Hamás ha ejercido un control total en Gaza desde 2007, su rival, la Autoridad Palestina (AP), dominada por el movimiento Fatah, administra Cisjordania. Hamás indicó al comienzo de la guerra que no buscaba gobernar Gaza después del conflicto. Fuentes de Hamás informaron a AFP estar dispuestos a entregar los asuntos civiles de Gaza a una entidad palestina.

Actualmente Israel no tiene una postura definitiva sobre la gobernanza posterior a la guerra, más allá de rechazar cualquier rol tanto de Hamás como de la AP. No obstante, funcionarios israelíes, describen cualquiera de los escenarios como “una recompensa” por el sangriento ataque del 7 de octubre de 2023.