CONVERSACIÓN TELEFÓNICA
Estados Unidos y Rusia se encuentran en los preparativos para negociar en Viena un tratado que limita los arsenales nucleares de sus países.
Donald Trump y Vladimir Putin hablaron ayer jueves por teléfono. Además de la pandemia, los presidentes estadounidense y ruso hablaron de temas “bilaterales y globales críticos”, incluidos la necesidad de evitar una carrera armamentística entre Estados Unidos, Rusia y China, informó la Casa Blanca.
Estados Unidos y Rusia se encuentran en los preparativos para negociar en Viena un tratado que suceda al Nuevo Start, que limita los arsenales nucleares de sus países. China, por su parte, hasta el momento ha rechazado la presión del gobierno de Trump para sumarse a esas conversaciones, con el argumento de que su arsenal es mucho menor que el de las otras dos potencias.
Trump reiteró a Putin sus deseos de que las próximas conversaciones en Viena entre Washington y Moscú sobre control armamentístico lleguen a conclusiones favorables.
El Tratado Nuevo Start expira a comienzos del año próximo. Ese tratado, firmado en 2010, es el único que queda vigente entre ambos países para acordar un control en proliferación armamentística.
El pasado 8 de abril, cuando el tratado Nuevo Start cumplía diez años desde que fuera firmado en Praga por los entonces presidentes ruso, Dmitri Medvédev, y estadounidense, Barack Obama, el ministerio de Exteriores de Rusia declaró que consideraba “imprescindible” conservar dicho pacto y expresó su confianza en recibir una “pronta y positiva” respuesta de Washington.
Putin propuso también en diciembre prolongar su vigencia “sin ningún tipo de condiciones previas”.
En su llamada de ayer a Putin, Trump “reiteró su esperanza de evitar una carrera armamentística cara de tres carriles entre China, Rusia y Estados Unidos y espera avances en la venideras negociaciones de control de armas en Viena”, dijo un portavoz de la Casa Blanca.
Pacto nuclear.
Según una declaración del Kremlin, ambos líderes confirmaron la “urgencia” de reuniones bilaterales sobre “estabilidad estratégica y control de armas”. Los mandatarios también discutieron “la situación en torno al programa nuclear iraní” y subrayaron la “necesidad de una acción colectiva”, de acuerdo al comunicado ruso.
Rusia respalda a Irán en su programa nuclear civil, que según Estados Unidos esconde un proyecto militar del régimen iraní con fines armamentísticos.