EFE/AFP
Ucrania busca soluciones mientras las fuerzas rusas logran el mayor progreso en meses en la línea del frente y continúan avanzando en el este a pesar de sufrir pérdidas récord desde el inicio de la invasión, según informó Kiev.
El ejército ruso continúa “una de las ofensivas más feroces” desde el comienzo de la guerra, según el comandante en jefe ucraniano Oleksandr Sirski. Este ejército ha acelerado recientemente su avance en el este de Ucrania, más notablemente en el centro de la región de Donetsk, cerca de Kurajove y Pokrovsk, al capturar unos 200 kilómetros cuadrados. Aunque este progreso aún no representa un avance decisivo, la tendencia es preocupante y hace sonar muchas alarmas en Ucrania en medio de pocas señales de que sus aliados en el exterior estén dispuestos a responder a los pedidos de Ucrania de más apoyo.
Coyuntura crítica
El éxito de la campaña rusa en Donetsk se debe en gran medida a las tradicionales ventajas de Moscú en la cantidad de municiones y soldados, junto con su aparente desprecio por las pérdidas, escribe el analista militar ucraniano Mikola Bielieskov para el grupo de expertos Atlantic Council, con sede en Estados Unidos.
Según él, la invasión rusa se encuentra ahora en un momento crítico y, a menos que los aliados de Ucrania tomen medidas en los próximos meses para revertir la dinámica negativa, la ventaja de Rusia seguirá creciendo hasta que la situación militar llegue “al punto de no retorno”.
“Las necesidades de Ucrania son bien conocidas e incluyen un aumento significativo de la ayuda militar junto con el levantamiento de las restricciones al uso de armas occidentales”, subraya Bielieskov.
Sin embargo, es poco probable que los aliados de Ucrania incrementen su apoyo militar, cree el conocido bloguero militar Sergui Sternenko.
Según este analista, Ucrania está perdiendo actualmente la guerra y se necesita urgentemente una reforma militar para garantizar que el país pueda utilizar sus recursos más pequeños de manera más eficiente para detener al oponente más grande.
Sumándose a voces provenientes del ejército, Sternenko insistió en un video reciente en que se debe reformar la estructura del comando militar de Ucrania. En particular, hay que abandonar la práctica de dividir brigadas enteras en muchas unidades pequeñas y mal coordinadas que luchan en diferentes partes de la línea del frente, sostiene. A su juicio, los militares deberían centrarse en fortalecer las brigadas experimentadas existentes que necesitan urgentemente nuevos soldados y podrían ayudar a entrenarlas en lugar de crear y entrenar nuevas brigadas desde cero.
Ucrania planea movilizar a 160.000 personas más, pero las cifras de reclutamiento han ido disminuyendo en medio de frecuentes quejas sobre la baja calidad de algunos de los nuevos reclutas debido a su mala salud y a su motivación insuficiente.
El hecho de que Rusia también esté sufriendo y se esté quedando poco a poco sin equipos como tanques y vehículos blindados de combate da esperanzas de que Ucrania puede ganar la guerra, si aumenta su propia eficiencia.
Donesk
Las fuerzas rusas han ocupado Kurajivka y Shajtarse en el centro de la región de Donetsk (este), informa la plataforma analítica DeepState.
Rusia también ha avanzado en otros cinco asentamientos a lo largo de la línea del frente en esta región: Maksimilianivka, Verbove, Novoselivka, Vovchenka y Maksimivka. Además, recuperó algunos territorios cerca de Sheptujovka en la región rusa de Kursk.
Los avances en Donetsk han permitido a las tropas rusas acercarse a Kurajove, uno de sus objetivos prioritarios. En total, 51 ataques rusos fueron repelidos el sábado en la zona cercana a Kurajove, informó ayer el Estado Mayor del Ejército ucraniano, mientras que 23 ataques ocurrieron cerca de Pokrovsk.
En total, se registraron 173 combates a lo largo de la línea del frente en Ucrania en el mismo período, y Rusia bombardeó posiciones ucranianas y zonas residenciales de la línea del frente tres mil veces con artillería y lanzó 114 bombas aéreas guiadas.
Más de 3.300 ciudadanías rusas recientes para combatir
Más de 3.300 extranjeros han recibido este año la ciudadanía rusa por participar en la guerra lanzada por el Kremlin en Ucrania, informó el Ministerio de Interior de Rusia, Irina Volk. “Desde principios de año, de acuerdo con el decreto del Presidente de la Federación de Rusia, 3.344 ciudadanos extranjeros adquirieron la ciudadanía por motivos similares”, escribió Volk en su canal de Telegram.
El pasado 4 de enero el presidente ruso, Vladímir Putin, emitió un decreto que simplificó la concesión de la ciudanía rusa a los extranjeros que hayan firmado contrato para servir en las Fuerzas Armadas en el periodo de la “operación militar especial”, como denomina Moscú la guerra en Ucrania.
El procedimiento simplicado de naturalización se aplica también a los familiares directos -cónyuge, padres e hijos- de los extranjeros que hayan prestado servicio en el Ejército ruso desde el 24 de febrero de 2022, cuando Rusia irrumpió en Ucrania.