EFE
Un año después del asalto a los tres poderes de Brasil, las causas judiciales avanzan rápido en la Corte Suprema con un balance parcial de 1.413 denunciados, 66 presos, 30 condenados y muchas incógnitas por resolver, entre ellas el papel del expresidente Jair Bolsonaro.
La tentativa de golpe que protagonizaron radicales de extrema derecha para derrocar el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva está siendo castigada con firmeza por el Supremo, aunque por el momento ningún alto cargo de la época está en prisión.
Entre el 8 de enero de 2023, cuando miles de bolsonaristas invadieron y destrozaron las sedes de la Presidencia, el Congreso y el Supremo en su intento de provocar una intervención militar, y el 9 fueron detenidas 2.170 personas en Brasilia. A partir de febrero, el Supremo concedió libertad provisional a la gran mayoría y hoy soquedan 66 personas entre rejas: 8 condenados, 33 imputados como “ejecutores” de la asonada -dos de ellos están en un psiquiátrico- y 25 por sospechas de financiar o incitar el golpe.
El Supremo dictó la primera sentencia el pasado 14 de septiembre contra un antiguo funcionario de la compañía de aguas de São Paulo. Recibió 17 años de prisión por cinco delitos, entre ellos abolición violenta del Estado Democrático de Derecho y tentativa de golpe. Desde entonces, ha condenado a 30 personas, con penas de entre 3 y 17 años de cárcel.
“La lección es que actos criminales como estos tienen consecuencias. No es posible minimizar o relativizar lo sucedido”, dijo el presidente del Supremo, Luís Roberto Barroso.
En la Justicia Militar, hay tres procesos abiertos. En uno se condenó a un coronel de la reserva del Ejército a 1 mes y 18 días de reclusión por injurias a sus superiores. El segundo está en instrucción y tiene por objeto otro coronel y el tercero es una investigación a un capitán de la Marina.
La Fiscalía ha denunciado formalmente a 1.413 personas, entre incitadores, ejecutores, agentes públicos y un financiador. No obstante, el Supremo suspendió en agosto la tramitación de más de 1.000 querellas y ofreció la posibilidad de cerrar acuerdos de colaboración con los imputados. En diciembre validó los primeros 38 acuerdos.
Acto
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, encabezará hoy, lunes, una gran ceremonia institucional de “reafirmación de la democracia”, un año después de la asonada promovida por la extrema derecha del exmandatario Jair Bolsonaro, que intentó derrocar a su Gobierno.
El acto será celebrado en el Salón Negro del Congreso nacional y reunirá a autoridades de todos los poderes del Estado, gobernadores, ministros y representantes de la sociedad civil, que se unirán en repudio al golpismo y en defensa de la democracia.
La Justicia consideró al asalto institucional del año pasado el “más brutal ataque a la democracia” brasileña desde el golpe militar de 1964. Bolsonaro y su partido han asegurado que los arrestados eran “patriotas” que ese día protestaron “pacíficamente” y cayeron en una “emboscada” articulada por “infiltrados comunistas y violentos”, una tesis ya desmontada completamente por la Justicia.
Aún así, un grupo de parlamentarios bolsonaristas ha declarado que este 8 de enero será el “día del escarnio” y anunciado que no asistirán a la ceremonia que se realizará en el Congreso.
Ideólogos del acto golpista del 8 de enero
¿Y los autores intelectuales? Hasta ahora han avanzado con celeridad los juicios contra los bolsonaristas que causaron el caos en Brasilia, pero la Policía continúa investigando quiénes financiaron y arquitectaron el movimiento golpista.
Para ello puso en marcha la “Operación Lesa Patria” a partir de la cual ha realizado 367 registros en busca de pruebas.
Hay dos figuras clave en la trama: Anderson Torres, exministro de Justicia de Bolsonaro y en cuya casa fue encontrado un borrador de decreto para anular la victoria electoral de Lula; y el teniente-coronel Mauro Cid, antiguo edecán del exmandatario (2019-2022).
Ambos estuvieron un tiempo en la cárcel, pero hoy responden en libertad. Bolsonaro consta como investigado. El expresidente estaba en Estados Unidos el 8 de enero de 2023.