CONDENA
Con 26 votos a favor, tres en contra y cinco abstenciones, el Consejo Permanente de la OEA aprobó la resolución sobre la situación en Nicaragua.
"Uruguay rechaza la detención y persecución penal a que han sido sometidos dirigentes políticos de oposición y posibles candidatos" de Nicaragua, expresa un comunicado de Cancillería emitido este martes, cuando restan casi cinco meses para las elecciones presidenciales del 7 de noviembre en las que el gobernante Daniel Ortega, en el poder desde el 2007, busca una nueva reelección.
En esa línea, "Uruguay insta al gobierno de Nicaragua a liberar de inmediato a las personas detenidas y a tomar las medidas pertinentes para llevar a cabo un proceso democrático y reconocido internacionalmente, dentro del Estado de Derecho y con plena separación de poderes, tal como le ha sido solicitado a través de la Resolución adoptada por la OEA en el día de la fecha".
?? La situación en Nicaragua:
?https://t.co/uDI7eRYu4X pic.twitter.com/U5nSHj4geZ
— Cancillería Uruguay ?? (@MRREE_Uruguay) June 15, 2021
Uruguay apoyó la resolución de la OEA de este martes que condenó "inequívocamente" el arresto de opositores al gobierno de Ortega, y pidió la "inmediata liberación de los precandidatos presidenciales y de todos los presos políticos" en ese país centroamericano.
El texto fue aprobado por 26 votos durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA. En contra votaron Nicaragua, Bolivia y San Vicente y las Granadinas, en tanto Argentina, Belice, Dominica, Honduras y México se abstuvieron.
La Policía de Nicaragua, que dirige Francisco Díaz, un consuegro del presidente Ortega, arrestó este fin de semana a seis disidentes sandinistas, incluidos los exguerrilleros Dora María Téllez y Hugo Torres, y al exvicecanciller Víctor Hugo Tinoco.
También mantiene bajo arresto a los aspirantes presidenciales de la oposición Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro García.
Doce de los trece opositores detenidos, incluyendo tres de los cuatro aspirantes a la Presidencia, están siendo investigados por "incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos" y "pedir intervenciones militares" contra el Gobierno de Ortega, entre otros delitos.
"Cualquier intento de un actor nacional o extranjero de socavar una investigación de esta naturaleza, también debe considerarse en el contexto de la legislación vigente, y debe ser percibido como un ataque frontal contra los principios del respeto al estado de derecho, la democracia, la soberanía nacional y la libre autodeterminación en Nicaragua", señaló al respecto el Ejecutivo centroamericano.