LA LUCHA CONTRA LA PANDEMIA
“Reafirma la seriedad del trabajo realizado por la Comisión Nacional Asesora de Vacunas más grupo ad-hoc y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública”, dijo Salinas.
Chile y Uruguay, los dos países que mejor han vacunado en la región contra el COVID-19, celebraron ayer martes el anuncio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de que aprobó el uso de emergencia de la vacuna de Sinovac, la que más están usando.
“Reafirma la seriedad del trabajo realizado por la Comisión Nacional Asesora de Vacunas más grupo ad-hoc y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública”, dijo en Twitter el ministro de Salud, Daniel Salinas.
Del otro lado de la cordillera de los Andes, su colega chileno, Enrique Paris, completó: “Es una gran noticia y una alegría para Chile y para nuestro plan de inmunizaciones”.
Chile y Uruguay están usando las mismas tres vacunas contra el COVID-19: Pfizer/BioNTech, AstraZeneca y Sinovac.
La OMS recomendó la vacuna de Sinovac, que requiere dos dosis a intervalos de entre dos y cuatro semanas para mayores de 18 años.
Se trata del segundo inmunizante chino aprobado por la OMS, y a partir de ahora también podrá ser utilizado para el dispositivo internacional Covax de distribución de vacunas, sobre todo en países desfavorecidos.
“El mundo necesita desesperadamente numerosas vacunas anti-covid para hacer frente a las enormes desigualdades en todo el planeta”, declaró Mariangela Simao, subdirectora general de la OMS encargada del acceso a los medicamentos y a los productos sanitarios.
El 7 de mayo, la OMS había aprobado la vacuna china Sinopharm. La eficacia de Sinovac para prevenir los casos de COVID-19 sintomáticos es del 51%, pero tiene una eficacia del 100% para evitar casos graves y hospitalizaciones en las poblaciones estudiadas, según la OMS. Su eficacia en mayores de 60 años no se ha estudiado.
Sinopharm y Sinovac son además las primeras vacunas contra la COVID-19 a las que la OMS da esta luz verde sin que previamente hubiera una decisión similar por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) o la Administración de Fármacos y Alimentos de EEUU (FDA).
La OMS también ha aprobado el uso de las vacunas de Moderna, de Pfizer/BioNTech, de AstraZeneca y la de Johnson & Johnson.
Abre fronteras.
El aval de la OMS a Sinovac amplía las opciones de viaje al exterior para los uruguayos.
Por ejemplo, el pasado 20 de mayo la Unión Europea (UE) aprobó la apertura de sus fronteras a los viajeros de terceros países completamente vacunados o de aquellos con una situación epidemiológica favorable.
En concreto, se permitía entonces la entrada a los que tengan las vacunas autorizadas por la EMA -que son la de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca y Janssen-, así como las aceptadas por la OMS.
Para entonces la OMS hacía pocos días que había aprobado la vacuna china Sinopharm, pero no la Sinovac, que ahora se agregará a la lista.
Los viajeros deberán demostrar que se han inoculado el fármaco 14 días antes de entrar a territorio comunitario y, según el acuerdo alcanzado por los países de la UE, las personas vacunadas ya no tendrán que someterse a algunas de las restricciones actuales a la movilidad.
También se permitirá la entrada a los ciudadanos de aquellos países con una incidencia acumulada en 14 días de 75 casos por cada 100.000 habitantes.
Efectividad.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) publicó la semana pasada los primeros resultados sobre la efectividad de las vacunas contra el COVID-19 en Uruguay. Los datos muestran cómo se comportó el virus en la población que ya recibió las dos dosis de Sinovac o Pfizer.
La vacuna de Sinovac evita el 95% de los ingresos a CTI y la de Pfizer lo hace en el 99% de los casos. El inmunólogo Álvaro Díaz destacó que “aún en un contexto con la variante P1 siendo la más dominante”, es “importante” saber que los ingresos a cuidados intensivos van a disminuir a medida que la gente se vacune.
En cuanto a la capacidad de evitar la enfermedad, el informe del MSP dice que Sinovac lo hace con una efectividad del 57%, mientras que a la de Pfizer se le otorga una capacidad del 75%.
La doctora en Bioquímica y especialista en Inmunología Aplicada, Lucía Vanrell, dijo que “no es justo” comparar a la población vacunada con Sinovac con la inoculada con Pfizer. Esto, explica, tiene que ver con que quienes recibieron Sinovac son más jóvenes y, por ende, tienen un sistema inmunológico en mejores condiciones. Tampoco están tan expuestos al virus como el personal de la salud que recibió Pfizer, según el esquema de vacunación en Uruguay.
En este sentido, Díaz menciona que el 75% de prevención para Pfizer es “esperable” a partir de la circulación de la variante P1, prácticamente la responsable del 100% de los casos que se detectan hoy en el país.
En Chile, un informe del Gobierno de unos días afirma que la vacuna de Sinovac evita un 65,3% de contagios, frente al 95% de Pfizer/BioNTech o el 80% de AstraZeneca, aunque es un 86% eficaz para evitar las muertes y un 90,3% para frenar los ingresos a CTI. (Con información de AFP y EFE)
Brasil firmó acuerdo para fabricar la AstraZeneca
Brasil firmó ayer martes un contrato de transferencia tecnológica con la firma anglo-sueca AstraZeneca para la fabricación local y con autonomía de su vacuna contra el COVID-19 desarrollada junto con la Universidad de Oxford. El acuerdo permitirá a la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), centro de investigación médica de referencia en Brasil, tener acceso completo al método de producción de la vacuna y poder fabricar en el país el llamado IFA, un componente clave. Hasta ahora, la Fiocruz producía la vacuna de AstraZeneca, pero importando el IFA desde otros países, sobre todo de China, en el marco de un acuerdo alcanzado el año pasado entre Brasil y el laboratorio anglo-sueco. El presidente Jair Bolsonaro dijo en un acto que el acuerdo posibilitará que “muy brevemente” Brasil pueda “hasta exportar” la vacuna. Entre los 212 millones de brasileños, apenas 22 millones han recibido las dos dosis hasta ahora.