El martes 6 de junio se produjo un nuevo hallazgo de restos óseos en el Batallón 14 del Ejército Nacional. Los restos, que por el momento se encuentran en proceso de identificación,pertenecen a un detenido desaparecido durante la dictadura militar uruguaya, según expresó en conferencia Alicia Lusiardo, coordinadora del Grupo de Antropología Forense (GIAF).

Este es el sexto hallazgo de este tipo en el país desde el comienzo de las excavaciones en el año 2005. ¿Cómo trabaja el grupo de antropología forense que busca restos de detenidos desaparecidos durante la dictadura militar en Uruguay? ¿Cuál es la metodología para excavar?

El Grupo de Investigación de Antropología Forense (GIAF) de la Universidad de la República es un equipo especializado que se encarga de investigar y procurar restos de personas desaparecidas durante la dictadura. Fue creado en el año 2005 y los primeros trabajos realizados fueron en el Batallón 13.

Las formas de abordaje y búsqueda han cambiado a lo largo de los años. Con una base de indicios que nunca son precisos, el equipo elabora un plan de trabajo anual. Los lugares que determinan para buscar pueden ser fruto de nuevas declaraciones o del proceso que desde hace años llevan a cabo.

“Se levanta un plano pero previo se grilla, hacemos cuadrículas de 10 por 10 metros que nos permite hacer el levantamiento planimétrico y las excavaciones y en esas cuadrículas la máquina realiza excavaciones contiguas, sin dejar espacio y lo que se va haciendo es controlar las paredes que lo que permite ver que el suelo está natural”, explica Ximena Salvo, quien forma parte del GIAF.

Hay algunas características comunes en los sitios de los hallazgos, por ejemplo, que suelen darse en lugares de vegetación abundante con el fin del ocultamiento. “En general son lugares que no están a la vista de las personas que de alguna manera transitaban por esos predios, ni debajo de edificios, lugares alejados con algún vínculo con la caminería”, explica Lusiardo.

Otro denominador común es la presencia de cal en los restos que han hallado. Respecto a esto hay dos teorías: por un lado, que se utilizaba como forma de evitar la identificación de la persona, ya que podría afectar el tejido blando, y por otro lado que se podría utilizar como forma de enmascarar el olor de la descomposición o evitar la atracción de animales.

Los primeros restos encontrados fueron los de Ubagésner Cháves Sosa, el 29 de noviembre de 2005, en un sitio conocido como la Chacra de Pando. Ese lugar fue utilizado por el MLN en 1970 y años más tarde pasó a estar en manos de la Justicia Militar. Según las fichas oficiales de la Secretaría de Derechos Humanos para el Pasado Reciente, Chaves Sosa fue detenido el 28 de mayo de 1976 en la calle Vaimaca, en Montevideo.

Días después, el 2 de diciembre de ese mismo, año hubo otro hallazgo: bajo una pista anónima los investigadores pudieron encontrar restos en el Batallón 13. Más tarde sabrían que se trataba de Fernando Miranda, detenido en su domicilio en noviembre de 1975.

El tercer hallazgo se dio en 2011 en el Batallón de Infantería número 14. El maestro Julio Castro había sido detenido en 1977 en la vía pública. El cuarto hallazgo ocurrió al año siguiente en el mismo predio y fue identificado como Ricardo Blanco Valiente. El comerciante, militante del Partido Comunista, fue detenido en 1978 en su domicilio en Montevideo.

El quinto hallazgo ocurrió en 2019 y los restos correspondían a Eduardo Bleier. El odontólogo había sido detenido en octubre de 1975 en la vía pública.

Esta nota fue publicada originalmente en julio de 2023. Posteriormente los restos encontrados en el Batallón 14 fueron identificados como los de Amelia Sanjurjo.