INFORME

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La mayor parte del día es casi imposible estacionar en el centro de Carrasco. Los comercios y restaurantes ubicados en Arocena rebosan de gente. Y esto no solo sucede en la arteria del barrio, sino también en las paralelas, Costa Rica y Divina Comedia. Lo que empezó siendo un balneario, luego se convirtió en un área residencial y ahora es una pujante zona comercial.

En el último tiempo han abierto varias propuestas gastronómicas: Mercado Arocena, La Panera Rosa, Futuro Refuerzos, Grøt, Saint Germain y La Resistance Boulangerie, solo por nombrar algunos. Incluso la marca de moda Rotunda abrirá en las próximas semanas un café, Otero.

Para Mercedes Ruiz, alcaldesa del municipio E, «hay un empuje comercial grande», sobre todo en el rubro gastronómico. «Además se está ampliando, el movimiento no solo está en el centro de Carrasco, sino que está yendo más hacia el norte. Sumado a eso,han abierto muchas oficinas, y al haber más gente, eso va trayendo otras cosas», agregó.
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Este crecimiento trajo consigo un mayor congestionamiento en el tránsito, algo en lo que Ruiz afirmó estar «trabajando» y como consecuencia algunas de las calles pasaron a ser flechadas.

Ignacio Albanell Meikle, director de la inmobiliaria Meikle, explicó que este proceso se viene dando desde hace años pero -como sucedió con muchas otras cosas- se aceleró en la pandemia. «Carrasco, sobre todo la parte céntrica, viene teniendo un cambio de casas de familia a oficinas», dijo a El Empresario. Y, con las oficinas, el barrio empezó a tener más movimiento durante el día.

Por ejemplo, Starbucks, que decidió abrir su segunda tienda en Uruguay en Arocena hace ya cuatro años, en el último tiempo vio un aumento en sus ventas, tanto en la tienda como online. Desde la compañía aseguraron que la cafetería se consolidó como «un lugar de encuentro y reunión» para los ejecutivos de la zona, al mismo tiempo que creció la venta por PedidosYa «debido a la gran cantidad de oficinas y gente que pide su café para el trabajo».

Enrique Quinteros, director de EQ Markets, el grupo detrás de Mercado Arocena confirma la importancia del público de las oficinas.

«Antes de instalarnos, a través de varios estudios vimos que Carrasco cambió, es una zona mucho más empresarial que residencial», dijo Quinteros y agregó: «Al mediodía van al Mercado muchas familias con hijos desde los colegios y también un público corporativo. Con esta ubicación somos una solución bastante rápida para las personas que trabajan en empresas de la zona. A la noche funciona con mucho delivery y más gente local, como experiencia gastronómica».

Mercado Arocena abrió hace un año en la antigua sede de «La Conaprole» con una inversión de US$ 1 millón para la restauración y acondicionamiento del edificio, que hoy alberga 14 propuestas gastronómicas, desde comida mexicana hasta sushi. «El barrio sigue creciendo, atrás del Mercado van a abrir varias oficinas y eso nos va a traer aún más tráfico. Nos estamos preparando para eso», concluyó Quinteros.

En ese sentido, uno de los proyectos más importantes es Carrasco Valley, un complejo de oficinas que implicó una inversión de más de US$ 25 millones y consiste en dos edificios de cuatro pisos de 6.600 m2 para oficinas. Su inauguración será en marzo de 2023 y ya tienen un 85% de las oficinas vendidas. Los clientes, en su mayoría, son quienes las van a ocupar, aunque algunos compraron espacios como inversión.

De acuerdo con Ximena de Azpitarte, socia directora de Carrasco Valley, «los dos (clientes) mayores en área se mudan desde Ciudad Vieja, hay varios que vienen desde allá».

Mientras Carrasco se llena, la Ciudad Vieja, clásico epicentro de los bancos y el mundo corporativo se vacía -un proceso que comenzó con la aparición del World Trade Center- .

«Veíamos que la ciudad se estaba moviendo hacia el este; era bastante claro desde el punto de vista residencial. Pero a la vez hubo un movimiento, tal vez más cultural, de que tu trabajo esté más cerca de tu casa: la gente ya no tenía ganas de perder tiempo en distancias. Además, en todos estos años la cantidad de automóviles ha aumentado y las vías desde el este hacia la ciudad siguen siendo las mismas. Veíamos el potencial en hacer oficinas en un lugar premium de Carrasco», evaluó De Azpitarte.

Carrasco Valley está ubicado en la esquina de Costa Rica y Rivera, en lo que antes era el hotel de los trabajadores del Casino Carrasco.

Por otro lado, en el rubro moda, la diseñadora uruguaya Margo Baridon abrió su tienda en Rostand a finales de 2019, después de detectar que la mayoría de sus clientas se encontraban en Carrasco. Era toda una apuesta, teniendo en cuenta que la mayoría de las tiendas de diseño uruguayo se concentran en Pocitos y abren en Carrasco cuando van por el segundo local. Incluso, a pesar de haber tenido que cerrar unos meses en pandemia, el local es un éxito.

«Hay muchísimas clientas que, aunque compren por la web desde otro barrio de Montevideo, eligen pick up y van los sábados a buscar el paquete. Según las entrevistas que habíamos hecho, al cliente de Carrasco era más difícil trasladarlo», explicó.

Según un informe realizado con datos de Gallito Luis, en el período de octubre de 2019 a septiembre de 2022, la cantidad de oficinas y locales comerciales disponibles para alquiler en Carrasco viene decreciendo.

«Podría explicarse por pérdida de dinámica en la zona (que no parece ser el caso) o por una progresiva concreción de negocios a mayor velocidad que lo que crece la oferta», analizó el economista y gerente de productos de El País, Gabriel Verdún, autor del informe.

Paralelamente, los precios por metro cuadrado han ido subiendo, tanto para compra como alquiler. «El descenso en la cantidad de propiedades viene acompañado por una suba en los precios para ambos tipos de propiedades analizadas. En el caso de oficinas, los precios actualmente se encuentran en un nivel superior al de fines del 2019, por el comportamiento de las cantidades es de esperar que ese nivel al menos se mantenga», concluyó Verdún.

Por su parte, Albanell observa desde la inmobilaria Meikle que «hay poca oferta tanto de casas como de locales comerciales, locales no hay prácticamente», por lo que muchas veces las empresas terminan alquilando residencias grandes y transformando la planta baja en un comercio y la planta alta en oficinas.