AFTER WORK

Silvana Nicola

Un mercado de pulgas, plantas y, por supuesto, buena gastronomía, serán protagonistas mañana de los dos años de El Vivero.

En Patriotas 4329 (Prado), la casa hará una celebración gratuita y abierta; una excusa perfecta para acercarse a ese oasis urbano donde las plantas y la gastronomía tientan con una puesta en escena tan única como original.
Juan Pablo Romero, Juan Francisco Astesiano, Facundo Dellacasa, Gonzalo Martínez y Luciana Mattos, sus propietarios, orquestaron un horario amplio (de 12.00 a 02.00) para recibir a su clientela, de familias con niños al público más joven y noctámbulo.

«En el Mercado de pulgas serán 11 emprendedores, habrá desde joyería artesanal, pasando por tazas y platitos a macetas de diseño, pinturas y cuadros», adelantó Romero. Como siempre, las plantas serán protagonistas del acontecimiento, así como el restaurante, que funcionará con normalidad y deleitará con sus exquisiteces caseras.

A la noche, Raca, Muten y Sonidero Mandinga le pondrán su ritmo al festejo que se extenderá hasta las 2 de la madrugada.

No faltarán los tragos de autor. «Tenemos opciones que contemplan todos los gustos, de los más cítricos a los más frescos y siempre estamos abiertos a escuchar qué prefieren nuestros clientes porque esa interacción nos enriquece a todos», enfatizó Romero.

Al cumpleaños de dos años, esta semana se sumó otro motivo para brindar por lo alto: la apertura de La casita del Vivero, en Carrasco (Alberdi 6047).

«Abrir un nuevo vivero surgió de la inquietud de seguir construyendo lugares únicos con piezas únicas», contó Romero y adelantó que el objetivo es extender el concepto hacia el este. «Carrasco fue la primera parada», confesó.

«Cada objeto que está en nuestros locales, desde la primera puerta hasta la última ventana, es parte de una recolección propia que da paso a rincones con objetos antiguos, arte y diseño. Todo fue hecho para que nuestros clientes se sientan en su casa», concluyó.