Conaprole hace frente a los momentos difíciles del sector, redoblando su apuesta al futuro del país en apoyo de sus más de 1.600 productores, manteniendo dinámica de las exportaciones a 60 países y expandiendo su línea de productos congelados a nuevas categorías.

«En 2023 hubo una caída de los precios internacionales y desde abril de este año hubo un exceso de lluvias que impactó con una rebaja mensual del 8% del volumen de remisión de leche a planta, de modo que las condiciones climáticas nos afectaron el volumen de producción», sostuvo el CEO de Conaprole, Gabriel Valdés, en el marco de las actividades llevadas adelante en la reciente Expo Prado 2024.

Valdés se mostró optimista sobre las perspectivas a futuro. «El mundo sigue demandando alimentos de calidad y a la vez también exigiendo una producción sustentable, ambos aspectos que nosotros podemos dar respuesta satisfactoria», subrayó Valdés para luego agregar que Conaprole tiene una destacada trayectoria exportadora, que actualmente alcanza a 60 países. «Esto nos da estabilidad y posibilidades para seguir creciendo en un mundo que presenta volatilidad y conflictos bélicos que nos están afectando, aunque nosotros seguimos con una marca fuerte con ventas externas estimadas en US$ 600 millones para este año», subrayó Valdés.

En la diversificación de negocios, también ha llegado Polar Food, la marca de alimentos congelados de Conaprole con comercialización de papas fritas en bastón, empanadas, pan de ajo, ensalada rusa y líneas de vegetales (espinaca, arvejas, choclo, brócoli), entre otras líneas de productos que se irán incorporando.

En postres congelados, cuenta con alfajores de maicena y de chocolate, además de trufas y postres de chocolate y dulce de leche.