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Andrés Scotti, uno de los fundadores del centro deportivo Enfoque, no duda: «Activamos a la gente y ese es nuestro propósito».

La misión obtuvo tal aceptación por parte de los uruguayos que el pasado miércoles el centro inauguró su segunda sede, la ciudad deportiva. «Crecimos de manera vertiginosa desde su creación en 2018», recuerda el exfutbolista al puntualizar que hoy cuentan con 4.100 socios.

«Somos una institución muy joven, por suerte con una gran familia y con muchos ‘hinchas de’. El hecho de haber ayudado a personas a un cambio de vida favorable, es una satisfacción plena. Con que hayamos aportado a algunos a transformar su forma de vivir, a brindar más calidad de vida porque su salud mejoró, la misión está cumplida», sostiene y reafirma que es el socio la base de este proyecto.

La nueva ciudad deportiva cuenta con novedades que la hacen única: tiene una pista de atletismo bajo techo de 140 metros que convive con una clásica sala de aparatos, así como también dos canchas de tenis indoor que se suma a las de fútbol 5, fútbol 7, básquetbol, volley, hockey, handball y a la de arena donde se puede hacer beach volley y beach soccer sin dejar de lado actividades como box, patín, clases de yoga, pilates, gimnasia artística y karate. Además, una escuela de fútbol encabezada por reconocidos exfutbolistas como Mario Rebollo, Richard Porta, Mauricio Victorino y Diego Scotti, así como una escuela de básquetbol NBA liderada por Emilio Taboada.

El año pasado la apuesta dio un paso más. Tras el éxito del primer centro Enfoque, Scotti junto a Diego Godín, Mario Rebollo y Vicente Sánchez tomaron una decisión delicada: abrir una nueva sede.

«En plena pandemia surgió la posibilidad de hacer algo único a nivel deportivo en un predio con características increíbles y en un punto céntrico de la ciudad», cuenta el exfutbolista sobre el complejo ubicado en Agustín Abreu 2290 y Cardal, a pocos metros de bulevar Batlle y Ordóñez.

Pero la satisfacción de Scotti es doble por haber invertido en Uruguay, un hecho que no todos veían con buenos ojos: «Nos estimulaban a ir fuera del país, pero esto va mucho desde lo pasional, la vocación, lo mucho que nos ha brindado el deporte. Es una apuesta a muy largo plazo y el que va a hacer usufructo de este proyecto es el ciudadano por la cantidad de prestaciones que tiene».

De hecho, considera que el gran beneficiado es el socio, que desde un inicio confió en la propuesta y que hoy se encuentra con un abanico de servicios mucho más amplio. Aunque no deja de lado otro factor importante: la familia laboral.

«Enfoque es de todos y sobre todo de la gente que posibilita que abramos a primera hora de la mañana y cerramos tarde en la noche, que esté siempre impecable y preparado para recibir un montón de gente. Es una tarea de equipo y en eso nos apoyamos muchísimo y hemos tenido muy buenos resultados», agrega.

Más allá de que la nueva sede de Enfoque se acaba de inaugurar, el trabajo no cesa. Hoy en día hay 13.500 metros cuadrados que ya están operativos, pero todavía restan cerca de 10.000 y ese es el proyecto más inmediato.

«Hay mucho por hacer, mucho que proyectar y yo visualizo alguna cosa más, pero vayamos por parte que esto es grande y la inversión es muy fuerte y ronda los US$ 20 millones entre ambos complejos. Dejarlo regulado a una cuota social, que está por debajo de la media y con eso solventar una parte importante, no es cosa fácil», sostiene.

Unos 700 socios ya disfrutan de la ciudad deportiva Enfoque. «Más allá de tener una gestión privada es de la ciudad, del barrio y de la gente. Es pasional y un propósito de vida de los cuatro que estamos atrás», remata.