“Hemos mantenido un rol proactivo, planteando qué tipo de país queremos dejar a las próximas generaciones”, afirma Martínez Escrich. Desde la CCE, Martínez Escrich destacó tanto el rol como la posición de los empresarios ante los diversos asuntos públicos del Uruguay y, sobre todo, en el desarrollo de la actividad económica y la creación de empleos. “Nunca hemos perdido el rumbo en esa mirada a largo plazo a propósito del país que queremos y las desafiantes reformas que se necesitan de cara a ese futuro”, dijo el dirigente empresarial en diálogo con El País.
Iniciativa privada
Martínez Escrich reconoce que existen sectores de la sociedad que observan con desconfianza la labor de los empresarios. “Esto sucede porque no perciben con claridad qué significa ser empresario”, indicó el entrevistado para agregar:“Mi padre era empresario del sector gastronómico, pero decía que era comerciante. Hay comerciantes, como un cerrajero, que invierten, asumen riesgos, alquilan un local, pasan muchas horas en sus negocios para tener un ingreso, pagar salarios, impuestos, tarifas públicas y eso es parte de ser empresario”.
Al empresario se lo asocia “muchas veces a grandes capitales y eso no es así. Hasta hay algún integrante del Pit-Cnt que puede ser empresario o trabajador según en la silla en la que se siente. El empresario asume riesgos y también responsabilidades, invierte dinero, genera actividad y empleo, de modo que la iniciativa privada es clave para el progreso del país”, sostuvo el presidente de la CCE.
El dirigente empresarial sostuvo que nuestro país presenta la particularidad de “castigar el éxito” de las personas emprendedoras en distintos planos. “Sucede que en el mundo la persona que avanza, crece, se desarrolla y es exitosa, es reconocida y se toma como modelo a seguir. En Uruguay, al que le va bien porque atrás hay un trabajo y un esfuerzo, se genera un manto de duda y desconfianza... No sé si es envidia o un sentimiento nacional de conformismo con el statu quo. El que quiere despegar o hacer algún cambio es mal visto. Pero en el mundo de hoy, es una obligación comenzar a innovar, emprender, a ser disruptivo, a crear y tener un pensamiento crítico de desarrollo y avance para no quedar rezagado”.
Reformas
En el ámbito público, el presidente de la CCE sostuvo que es preciso encarar varias reformas pendientes y seguir profundizando otras. En ese sentido, expresó que la reforma educativa es básica para proyectar a nuestro país hacia un futuro de oportunidades.
“Cuando era estudiante, Uruguay era primero en el mundo en alfabetización y hoy somos lamentablemente terceros empezando de abajo en toda América Latina, por encima de Nicaragua y El Salvador”, indicó el entrevistado. También hizo hincapié en la reforma del sistema previsional, que actualmente está a consideración del Parlamento, porque “así com estamos va a colapsar el pago de las pasividades y la cobertura de la seguridad social”.
En tanto, el proceso de modernización del Estado presenta varias cuestiones. “Seguimos teniendo un Estado centralizado, que requiere trámites burocráticos que son inentendibles, en momentos que se precisa mayor agilidad y flexibidad para captar mayor volumen de inversiones y negocios”, señaló Martínez Escrich.
Camino del medio
Dentro y fuera de fronteras, Uruguay es valorado por su estabilidad. Sin embargo, el dirigente empresarial entiende que es preciso acelerar el ritmo de las transformaciones que el Uruguay, a su juicio, precisa con urgencia.
“El ritmo de las reformas prioritarias están en sintonía con nuestra idiosincrasia, que tiene su espejo hasta en la geografía de nuestro país: somos una penillanura, suavemente ondulada. Y así estamos”, apuntó.
Ante los distintos desafíos planteados, “Uruguay normalmente apuesta por el camino del medio cuando el mundo de hoy, de la mano de la innovación disruptiva de la tecnología, nos exige cambiar a gran velocidad o nos quedamos en el camino”.
Potencial
Para Martínez Escrich, nuestro país presenta “un enorme potencial de desarrollo” en sectores clave, como el de la tecnología de la información, la cadena agroindustrial, el hub logístico y el turismo. “Hay capacidad instalada, mano de obra capacitada, talento, experiencia, de modo que están dadas las condiciones para desarrollar al país y generar mayores ingresos de divisas para también hacer frente a los reclamos sociales y bajar los niveles de pobreza”, declaró Martínez Escrich.
El presidente de la CCE destacó la decisión del gobierno encabezado por Luis Lacalle Pou de poner en marcha la reforma de la educación. “Este gobierno ha tomado las riendas de los cambios, asumiendo riesgos políticos y electorales; ojalá se puedan concretar en beneficio del desarrollo del país, superando el estancamiento”.
“Hay que realizar reformas, tenemos que cambiar para el crecimiento del país para los próximos 20 o 30 años; es una obligación de todos, no sólo de las autoridades”, concluyó Martinez Escrich.