LA CIFRA ESCURRIDIZA
Un decreto topea en 10% del mercado las que puede tener un operador.
La cadena de farmacias más grande del país, Farmashop, persigue sin éxito desde hace meses un número: la cantidad de establecimientos de este tipo que hay en el país. Pero hasta el momento no ha logrado que el organismo del Estado que posee esta información, el Ministerio de Salud Pública (MSP), le brinde el dato. Esto, a pesar de que un decreto del Poder Ejecutivo del año pasado limitó —por segunda vez, hubo otro anterior de 2013— la cantidad de farmacias que una misma empresa puede tener.
A la compañía le va el futuro de su negocio en conseguir este dato, para saber si puede seguir expandiendo su operación en el país o no. "Nuestra última adquisición fue en 2013, estamos frenados en cuanto a adquisiciones desde 2013", dijo a El País el gerente general de Farmashop, Martín Sorrosal.
Cuando en enero de 2013 el fondo de inversión Linzor Capital Partners compró Farmashop su objetivo era elevar la cantidad de sucursales de las 78 que tenía por aquel entonces a 130 o 140 en un periodo de tres a cinco años. Pero un decreto del por entonces presidente José Mujica y luego otro de Tabaré Vázquez pusieron un palo en la rueda a los planes que había trazado este fondo con orígenes en Chile y especializado en negocios en América Latina.
Con diferencias —el primero establecía la cantidad máxima de farmacias que una misma empresa podía tener, el segundo marcaba también un tope pero por el lado de la participación de mercado—, estos decretos pincharon el globo de Linzor y truncaron el futuro que había imaginado para Farmashop.
A regañadientes, los recién llegados continuaron operando la compañía bajo estas nuevas reglas de juego. En paralelo, iniciaron acciones ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA) para tratar de que dejara sin efecto esas decisiones del Poder Ejecutivo. Para la empresa, estos decretos son anticonstitucionales.
Pero mientras no llega el fallo del TCA, la compañía sigue con sus locales abiertos en el país. Es por esto que los esfuerzos de la cadena se han concentrado más acá en el tiempo en otro aspecto: conocer cuántas farmacias hay en el país. Sin este número, no pueden saber cuán cerca o cuán lejos están del 10% de participación de mercado que tienen como tope para no infringir lo que marca el decreto de 2016.
Esta tarea se ha tornado más compleja de lo previsto. El MSP, quien releva esta información, no ha contestado de manera satisfactoria hasta el momento los pedidos de Farmashop. El País consultó al ministerio para esta nota, pero sin éxito.
"No puede no saber. Y mucho menos puede hacer un decreto limitando a un número sobre una base que no conoce cuál es", dijo a El País el fundador y director del grupo uruguayo InCapital —que tiene una participación minoritaria en Farmashop—, Martín Guerra.
Idas y vueltas.
La historia de Farmashop con el MSP para conseguir esta información ya tiene más de un capítulo. Primero le proporcionó una cifra (787 en marzo de este año), pero le aclaró que no era definitiva. Esto, dijo la cartera, se debía a que la División Evaluación Sanitaria —la encargada de recolectar esta información— estaba migrando su base de datos de una plataforma en papel a otra digital. Esta respuesta no satisfizo a la empresa, que inició un juicio para conseguir la cifra total de farmacias que hay en el país. En esa instancia los abogados del MSP dijeron que al amparo de la ley de acceso a la información pública (mecanismo que la empresa había utilizado en primera instancia) la cartera no tenía por qué brindar ese dato a Farmashop. El juez le dio la razón al MSP.
La firma apeló esta decisión, y a principios de septiembre el Tribunal de Apelaciones en lo Civil de 4° Turno revocó la sentencia de primera instancia y dio al MSP un plazo máximo de 30 días (que "excepcionalmente" se podrá prorrogar por otros 15) para brindar la información completa a Farmashop.
"Seguimos a la espera del número y el número no aparece", señaló Sorrosal.
Precisión.
Ante esta falta de información oficial, la empresa realizó un relevamiento propio para conocer cuántos comercios de este tipo hay en Uruguay y así develar si con sus 93 sucursales actuales se acerca al tope impuesto por el gobierno.
Según los números que maneja la firma, en el país habría entre 950 y 970 farmacias habilitadas.
"La precisión es importante, porque si pudiéramos comprar siete u ocho farmacias, por decir algo, capaz podríamos poner una en cada departamento y tener una operación nacional", dijo Guerra.
Farmashop hoy tiene presencia en Montevideo, Maldonado, Canelones, Cerro Largo, Soriano, Paysandú y Río Negro.
Por su parte, Sorrosal también se refirió a cómo este déficit informativo jaquea los planes de expansión de la firma.
"Nos hubiese encantado seguir creciendo, seguir llegando al interior del país", comentó el ejecutivo.
De todas maneras, enfatizó que la empresa no dará ningún paso hasta que el MSP le entregue el ansiado número que la tiene en vilo.
Los datos parciales son refutados por empresa.
Luego de que el MSP brindara un número incompleto de la cantidad de farmacias en el país, Farmashop viajó a algunos departamentos del interior para contrastar esa información con lo que encontrara allí. Los datos recabados con escribano mostraron inconsistencias con los brindados por la cartera. Por ejemplo, en Flores el MSP dijo que había cinco farmacias autorizadas y el relevamiento de Farmashop da cuenta de nueve. En Durazno el ministerio habla de cuatro y la empresa sostiene que son 17.
"Hoy el fondo no está pensando hacer inversiones en Uruguay".
Antes de las farmacias, para el fondo Linzor Capital Partners habían sido los cines en Uruguay. En 2007 compró la cadena Hoyts Cinemas, que tenía presencia en el país. Más tarde, en enero de 2013, realizó su segunda operación nacional, con la adquisición de Farmashop. Meses después, en noviembre de ese mismo año, hizo otra jugada local y se quedó con la panificadora Pagnifique. Solo habían pasado unos días desde la concreción de esta transacción cuando llegó el baldazo de agua fría: los ejecutivos del fondo se enteraron por la prensa del decreto de Mujica que frustraba los planes que tenían para Farmashop.
Esto sacó a Uruguay del radar del fondo, que desde ese momento no ha realizado ninguna inversión más en el país.
Ante la consulta de si estos decretos pusieron un freno a la búsqueda de oportunidades de negocio en el país, el gerente general de Farmashop responde "totalmente". Según Sorrosal, "hoy con esta situación y con los cambios de las reglas de juego de un día para otro, el fondo no está pensando en hacer inversiones en Uruguay bajo este contexto".
Linzor Capital Partners compró Farmashop a Daniel Devoto, empresario miembro de la familia que fundó la cadena de supermercados homónima. Devoto había creado Farmashop en 1998, luego de que su familia vendiera la compañía al Grupo Exxel.
Portafolio.
Si se mira el portafolio de Linzor al día de hoy discriminado por país, el 10% está concentrado en Uruguay. México, con una participación de 38%, es el mercado con mayor peso. Le siguen Colombia y Chile (con 13% cada uno), mientras que Perú tiene 8%. El 18% restante entra dentro de la categoría "regional", según la información que el fondo brinda en su sitio web. Por industria, en tanto, la tajada más grande (40%) corresponde a servicios financieros, mientras que en el segundo lugar se ubica retail, con 20%.
DECRETOS.
Noviembre 2013.
José Mujica firmó un decreto que establecía, entre otros, que "ninguna persona física o jurídica, conjunto económico o grupo de sociedades podrá ser titular de más de 15 establecimientos de farmacia de primera categoría" ni de dos o más comercios de este tipo instalados "en un radio menor a 1.000 metros".
Abril 2016.
El gobierno de Tabaré Vázquez sacó un nuevo decreto que derogó al anterior. En relación al tope, ahora dice que "ninguna persona física o jurídica, conjunto económico o grupo de sociedades podrá ser titular de más del 10% del total de los establecimientos de farmacia de primera categoría autorizados" por el MSP.