Uruguay es un país construído por la inmigración y sus descendientes y durante su historia, el país se caracterizó por recibir personas de varias nacionalidades. Muchos buscan nuevos comienzos, trabajo y un lugar donde instalarse. En los últimos años se registró un aumento de extranjeros de la región con residenciaen Uruguay como el caso de venezolanos que escaparon a la crisis económica en su momento y a la dictadura que se vive en su país.

Según los datos preliminares del Censo 2023 elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la población estimada de Uruguay es de 3.444.263 habitantes, de los que 61.800 son extranjeros.

En 2023, la Dirección Nacional de Migración (DNM) registró el ingreso de 1.870.644 personas y el egreso de 1.661.583 personas en el país país. Además, entre enero y mayo de este año, más de 5.000 personas no uruguayas solicitaron la residencia.

El último Censo estimó que el 27% de los residentes extranjeros son de nacionalidad venezolana, el 22% de Argentina y el 20% nacieron en Cuba.

Desde la Organización Internacional para las Migraciones en Uruguay (OIM), dijeron a El País que recibir a extranjeros en el territorio es “una oportunidad a potenciar” y que algunas de sus principales participaciones son dinamizar el mercado laboral y nuevos aportes socioculturales.

En ese sentido, la OIM sostuvo que algunas de las dificultades que más atraviesan los inmigrantes están vinculadas al costo del proceso de regularización y documentación. Además, resaltaron que las personas en situación de vulnerabilidad están más expuestas al riesgo de explotación, violencia y trata de personas.

Un informe elaborado por el Banco de Previsión Social (BPS) en abril pasado arrojó que entre 2017 y 2023 unos 157.497 inmigrantes tuvieron aportes a la seguridad social; 93.689 lo hicieron solo durante el último año.

El estudio también señaló que las mujeres tuvieron una mayor permanencia en el mercado laboral en 2023 (42%). Según el informe, el BPS estimó un mayor desempleo, informalidad y una menor permanencia en el país por parte de los hombres.

De acuerdo con los datos por nacionalidad, 32.741 trabajadores registrados en el BPS son de Argentina; un 37% más que en 2017 (23.825). A su vez, 14.487 trabajadores son de nacionalidad venezolana, un aumento de 218% desde 2017, cuando había 4.554.

Por su parte, la población cubana registró el mayor aumento de trabajadores en BPS desde 2017, ya que hay 434% más. El año pasado, 14.007 trabajadores fueron de nacionalidad cubana, mientras que en 2017 se habían registrado 2.625.

Según el estudio del BPS, en 2023 la mayoría de los extranjeros (18%) se desempeñaron en el sector de industria y comercio, que presenta un aumento de participación durante los últimos años.

Otras actividades tuvieron la participación del 13% de la población extranjera y el 8,9% se dedicó a la producción agropecuaria, forestación y pesca.

Esta actividad sufrió un descenso en comparación al 2017, cuando era una de las que más extranjeros empleaba, con el 12,2% de actividad.

La menor cantidad de extranjeros se registró en el sector vinculado a actividades en los hogares con un 3,9%, mientras que transporte y almacenamiento tuvo un 4,8% de actividad de extranjeros.

Por otra parte, una de las épocas con más movimiento migratorio fue durante la pandemia ya que en 2020, la Administración Nacional de Educación Pública, registró 5.755 estudiantes de nacionalidad extranjera, lo que representa un 1,7% del total de la matrícula de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (Dgeip).

La mayoría de estos estudiantes se matricularon en primaria en tiempo extendido, 3.031 lo hicieron en Montevideo, 801 en Canelones, 359 en Maldonado y el resto se extendió por el resto de los departamentos.

De acuerdo con el reporte anual 2023 de la OIM, las migraciones en el continente americano se generan, en su mayoría, dentro de las subregiones.

Si bien Estados Unidos encabeza como principal destino entre los latinoamericanos y caribeños, Brasil recibe población extracontinental. Desde ese país, también ocurren desplazamientos a Uruguay y Argentina.

El informe también hizo referencia a los puntos de ingreso al país, dentro de los cuales se destacó el departamento de Paysandú, donde se ubica la frontera con Argentina. Rio Negro, Salto y Colonia fueron los siguientes con mas ingresos debido a que también son fronterizos con el país vecino.

Datos de la Oficina Regional de la OIM para América del Sur, arrojaron que entre abril y setiembre del año pasado, los ingresos al país fueron mayores a los egresos.

Sin embargo, el informe excluyó el ingreso de ciudadanos uruguayos y se registró una disminución de 166.193 personas, comparado con las 244.621 registradas en 2022.

Respecto a las residencias en el país, en Montevideo, los extranjeros muestran una tendencia a instalarse en barrios con mayor acceso a locomoción y servicios como son Aguada, Tres Cruces, Centro, Cordón y Ciudad Vieja, según operadores inmobiliarios.