INFORME

Este contenido es exclusivo para nuestro suscriptores.

Las llamadas grandes superficies están sumando metros en el interior del país, en una apuesta por profundizar su alcance en el mercado y seguir potenciando su negocio. Las inversiones llegan a zonas tradicionales como el este pero también más allá.

Ta-Ta, con presencia en los 19 departamentos, tiene en sus planes ampliar su red en el Interior, una plaza que representa el 50% de su negocio, indicó el CEO Christopher Jones. «Estamos a punto de abrir la primera sucursal en Paso de los Toros (Tacuarembó) y tenemos planificada otra en Barros Blancos (Canelones)», detalló. Además, la cadena está en «plena negociación» para instalar otros cuatro puntos de venta, la mayoría de ellos fuera de Montevideo.

La expansión física se alinea con el propósito de la compañía de «bajar el costo de vida del Uruguay», y eso significa que «necesitamos tener una presencia en todo el país como ya la tenemos», explicó Jones. Esa búsqueda se apoya en un «surtido amplio, de calidad y en el precio», argumentó el CEO.

Las aperturas de locales son parte del plan que la compañía desarrollará en los próximos cinco años, un proyecto que se financiará con recursos como lainversión de US$ 10 millones que realizó BID Invest en julio del año pasado al ingresar como accionista de la compañía. En septiembre, el Grupo Ta-Ta concretó una colocación de obligaciones negociables por el equivalente a US$ 100 millones. Ambas operaciones se traducirán en inversiones en el canal físico así como también en la incorporación de tecnología con varios objetivos: optimizar la operación para llegar a precios bajos y vender más; dar herramientas al staff de las tiendas para atender a los clientes de forma más eficiente; personalizar la oferta y generar mayor fidelidad y hacer una logística cada vez más eficiente, señaló Jones.

La gestión iniciada por la nueva gerencia de Tienda Inglesa ha llevado a la cadena en estos cinco años a un proceso de inversión superior a los US$ 120 millones para mejorar la experiencia de compra y sustentar el crecimiento sostenido, con foco en los procesos, la tecnología, la logística y la infraestructura, relató Juan Manuel Parada, director general de Tienda Inglesa.

Esta etapa también permitió remodelar sucursales y retomar el proceso de aperturas que se había frenado en 2001 tras la llegada a Atlántida. Desde 2017 se inauguraron los locales de La Barra, Solanas, Cordón, calle Libertad (Pocitos), Tienda Deli en Montevideo Shopping y a fines de 2021, con una inversión de US$ 10 millones, lo hizo en Car One, en un espacio con más de 5.000 metros cuadrados (m2). «A la vez, terminamos 2021 con unos 40 supermercados de barrio asociados en diferentes puntos del país y otros tantos en procesos de asociarse con nosotros», evaluó Parada.

Con vistas a los próximos cinco años, Tienda Inglesa proyecta realizar «grandes inversiones», adelantó el ejecutivo. «Vamos a abrir nuevas sucursales y encararemos la remodelación del 100% de nuestros actuales locales. Además vamos a invertir muy fuertemente en nuestros canales de comercio electrónico», anticipó. Esos planes demandarán una inversión superior a los U$S 100 millones en proyectos que generarán entre 1.600 y 1.800 nuevos puestos de trabajo.

«Nuestra expectativa en los próximos años es tener una presencia nacional, en algunos casos directa y en otros vía alianzas estratégicas», analizó el director general de Tienda Inglesa. «Nos proponemos tener presencia en todas las ciudades del país de más de 10.000 habitantes. Hoy ya tenemos confirmada la construcción de siete nuevas sucursales que se abrirán en los próximos dos años».

En tanto, la expansión de Grupo Disco Uruguay (GDU) más allá de Montevideo acaba de sumar como hito más reciente la apertura de una sucursal de Fresh Market, de 200 m2, en José Ignacio, Maldonado (N.de.R.: El Empresario contactó a GDU para la nota pero la empresa se excusó de participar).

Un nuevo salón de venta de 2.000 m2 y un centro logístico de 8.000 m2 se instalarán en los próximos meses sobre la Ruta 5 entre las ciudades de La Paz y Las Piedras, en Canelones. Detrás del proyecto está la cadena de supermercados mayoristas Macromercado. «Tener presencia en el Interior es muy importante para la empresa. De hecho, estamos en Colonia, Rivera, Maldonado y Costa de Oro», comentaron desde la dirección de la cadena.

La región del Litoral está viendo un movimiento progresivo de la oferta supermercadista de la mano de jugadores comoEl Dorado. La empresa nacida en Maldonado está orientando sus inversiones en nuevos puntos de venta hacia la zona oeste del país. En 2021 abrió cinco supermercados en ciudades como Cardona (Soriano) y Fray Bentos (Río Negro). También sumó presencia en Paysandú y Paso de los Toros (Tacuarembó). Maldonado fue el punto elegido para la quinta apertura del año.

En total, El Dorado cuenta con 65 puntos de venta, de los cuales 52 son supermercados. El resto se compone de cinco tiendas de textil y calzado, cuatro de hogar, dos mayoristas, una casa de tecnología y un almacén de productos saludables. Con esa red despliega su presencia en Canelones, Cerro Largo, Lavalleja, Maldonado, Rocha, San José, Tacuarembó, Florida, Soriano, Treinta y Tres y Río Negro. Este año sumará un nuevo destino: Colonia.

«Nuestro objetivo es seguir expandiéndonos en el Interior, que es donde más cómodos nos sentimos. Tenemos planes para seguir abriendo sucursales, siempre buscando oportunidades propicias para eso», afirmó Ismael Scottini, director de El Dorado. Con ese énfasis en zonas como el litoral o el centro del país, las inversiones en el este pasan por remodelar, aggiornar y sumar servicios a las tiendas ya instaladas, acotó el empresario.

El sector de los supermercados ha visto cómo la pandemia impactó en el consumo y los hábitos de los clientes.

En Ta-Ta y Macromercado coincidieron en que el coronavirus no afectó los planes de crecimiento sino en la operativa diaria, con la aplicación de protocolos para cuidar al personal y a los clientes.

Scottini, en cambio, señaló que en este contexto la reapertura de fronteras marcó un antes y un después. Desde que se reabrieron se ha visto el regreso del «viejo hábito» de muchos uruguayos de cruzar a comprar en Argentina o Brasil incentivados por la diferencia cambiaria.

El coronavirus jugó también en otro sentido. La preferencia de ciertos consumidores por hacer sus compras -más impulsivas, al paso y sin hacer filas- en pequeños comercios de cercanía está favoreciendo el desarrollo de las tiendas de conveniencia más allá del área metropolitana, estimó Rodrigo Cardoney, jefe de franquicias de Kinko. La empresa, que tiene 29 locales (27 de ellos en Montevideo), busca crecer con ese formato.

«Nuestra apuesta de servicio y modelo (de negocio) es bien diferente al de las grandes superficies. Vemos que hay una necesidad de este tipo de formato de almacenes de conveniencia en el interior del país», aseguró Cardoney.

Otros factores influyeron en esa misma dirección: «la llegada de UPM, de inversores extranjeros que se radicaron en Punta del Este, de empresarios o ejecutivos que se fueron a hacer home office, de gente que se fue de Montevideo al Interior y se llevó también (para allí) el hábito de consumo de hacer la compra para dos o tres días o la compra rápida y por impulso», enumeró el representante de Kinko.

Según Cardoney, el consumidor del Interior valora algunas ventajas de las nuevas propuestas como la cercanía y el horario extendido. Esta percepción se traduce en un tíquet entre 10% y 15% superior al de Montevideo, indicó.
Kinko apunta a instalar sus franquicias en puntos con un alto tránsito de público. Para ello, confían en emprendedores locales que conozcan la dinámica de su ciudad.

Además de invertir en locales, las cadenas están impulsando servicios. Ta-Ta, por ejemplo, creó Encomienda Fácil para que sus clientes envíen paquetes y los retiren en cualquier súper de la cadena. La propuesta cobra fuerza en el interior del país y sirve de apoyo al canal de e-commerce, otro servicio en ascenso y que complementa la visita a una gran superficie. «La compra online sube cada vez que abrimos alguna sucursal en el interior», valoró Jones.

La góndolas —reales y virtuales— se multiplican de cara al consumidor en todo el país.

El grupo Ubesur acaba de crecer en el interior del país tras la incorporación de nueve supermercados (algunos de departamentos como San José, Río Negro y Durazno) tras alcanzar un acuerdo con IBF Negocios. El director de Ubesur, Gabriel Skliro, dijo que «el Interior vino» al grupo de intermediación comercial, porque con la llegada de las grandes superficies, los comercios de menor escala buscan mejorar su rentabilidad y potenciar su negocio a través de esta alianza. Hoy Ubesur está integrado por 46 locales minoristas de Montevideo, Canelones, San José, Flores, Florida, Colonia, Soriano, Durazno y Río Negro. Los socios adhieren firman un «contrato de servicio» por el que reciben experiencia, know how en la negociación con proveedores, herramientas de marketing, entre otros incentivos que ayudan a sus ventas.