El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), anunció ayer que los precios de las naftas y el supergás se mantendrán sin cambios en el mes de marzo, mientras que en el caso del gasoil 50 S se dará una baja de $ 2 por litros. El jueves pasado el director de Ancap, Richard Charamelo, había señalado a El País que estaba “todo dado” para congelar los precios, ya que las proyecciones indicaban que la situación internacional se mantenía incambiada.

Por lo tanto, a partir de hoy el precio de la nafta Súper 95 seguirá en $ 71,89 por litro, el kilo del supergás en $ 73,35, mientras que el litro de gasoil bajará de $ 58,99 a $ 56,99.

El anuncio fue realizado ayer por el subsecretario de Industria, Walter Verri, quien afirmó que Ancap “aún tiene espalda” para soportar la diferencia entre el Precio de Paridad de Importación (PPI) y el precio de venta al público, aunque advirtió que “hay que cuidarla”.

De acuerdo con el MIEM, con la baja en el gasoil, se acumula “una reducción (en el precio) de más del 12% desde el mes de junio”.

El cálculo del PPI elaborado por la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea), más otras variables que analiza el MIEM, señalaban que en marzo, el precio de venta al público de la nafta debía subir $ 2 por litro, mientras que en el gasoil sugería una baja de $ 4 por litro. Por tanto, tal y como ha ocurrido en múltiples ocasiones anteriores, el Poder Ejecutivo optó por no seguir las proyecciones de forma estricta.

De hecho, en febrero, las autoridades resolvieron congelar el precio de los combustibles, pese a que la referencia internacional marcaba un aumento. Y en ese mes, por no haber ajustado las tarifas a PPI, los ingresos que recibe Ancap por litro vendido habían quedado con un desfasaje de $ 2,6 en el caso de las naftas y de $ 0,9 en el caso del gasoil.

Si bien la actual baja del gasoil no beneficia a la recaudación de Ancap, Verri afirmó que sí “impactará en el bolsillo de la población”.

Por otra parte, ayer la Federación Ancap (Fancap) informó que brindarán las guardias gremiales mínimas necesarias para asegurar el normal funcionamiento de la refinería de La Teja, durante el paro de 24 horas que el sindicato realizará este jueves.

La posibilidad de que el sindicato no brindara esas guardias gremiales era motivo de preocupación del directorio de Ancap, dado que, según advirtieron el pasado viernes a El País, si no contaban con el personal necesario debían apagar la refinería de La Teja.

“Con compromiso y responsabilidad, tendremos en consideración cuestiones fundamentales como la importancia de una operativa segura en una industria de alto riesgo como es la refinación de petróleo”, así como también evitar “la afectación de las instalaciones”, indicó Fancap en un comunicado.

El motivo del conflicto entre el sindicato y la estatal es el descuento salarial del 15% que Ancap aplicará a 85 funcionarios de la refinería, por una serie de medidas sindicales que se tomaron a finales de diciembre.