Redacción El País
Uno de los principales errores que cometemos a la hora de administrar nuestro dinero es no establecer la relación entre nuestros ingresos y los gastos del mes. Esta diferenciación resulta crucial para no caer en compras innecesarias y distribuir la plata de forma adecuadapara hacerla rendir durante todo el mes. Esta edición de Finanzas de Bolsillo repasará algunos hábitos difíciles de adquirir pero necesarios para comprar de forma segura y adecuada sin que afecte nuestras posibilidades de ahorro.
La directora de Formación Financiera de la Fundación Banco República (BROU), Mariela Lindner, destacó la necesidad de establecer de forma detallada nuestros ingresos y gastos mensuales. Partir de la base de cuál es nuestra situación financiera es fundamental para administrar el dinero de mejor manera, por lo que registrar la información en una hoja de cálculo, un papel o en cualquier medio de nuestra preferencia resultará práctico y fácil para comenzar a transitar el camino del ahorro, adquirir un crédito y establecer una relación con una institución financiera.
Para evitar conductas recurrentes y poco sanas vinculadas a la mala distribución de nuestro dinero, es necesario establecer un presupuesto y destinar nuestros gastos de manera detallada para luego decidir dentro de nuestras posibilidades.
Poder elegir
Lindner explicó que un segundo paso para administrar el dinero de mejor forma es elegir entre los servicios financieros que ofrecen los bancos: formas de pago, ahorro y acceso al crédito. De esta manera, podremos comparar los servicios a nuestra conveniencia.
Otro factor importante luego de establecer nuestra situación y que resulta un hábito sumamente saludable para la administración de nuestras finanzas es comparar entre instituciones y poder decidir.

Gastar dinero es parte de una serie de decisiones y prioridades que tenemos en nuestra vida cotidiana, incluso la forma de pago es una elección. Por este motivo, Lindner expuso la diferencia y las ventajas y desventajas entre las distintas formas de pago: crédito, débito, transferencia bancaria y efectivo. Las últimas tres nos permiten adquirir algo y pagarlo en el mismo momento. En cambio, abonar con tarjeta de crédito implica un desfasaje temporal y nos permite aplazar el pago al mes siguiente.
Para elegir también es necesario evaluar los riesgos y cuidados que debemos tener a la hora de comprar. Lindner resaltó la importancia de no compartir la información personal de nuestras cuentas bancarias y tener presente dónde y cómo denunciar en el caso de extravío de una tarjeta.
Formas de pago
A medida que avanza la tecnología se instalan nuevas formas de pago en la sociedad y todas cuentan con sus ventajas y desventajas a la hora de pagar. El dinero en efectivo fue la forma de pago por excelencia hasta hace algunos años cuando las tarjetas de débito y crédito se posicionaron como preferencia; en su mayoría, por comodidad y sus beneficios fiscales.
Al pagar con débito en Uruguay obtenemos un descuento directo de dos puntos porcentuales del Impuesto al Valor Agregado (IVA). Además, a través de la app de la institución financiera correspondiente, podemos realizar un seguimiento de nuestras compras de forma automática: a medida que gastamos, observamos cómo baja nuestro saldo disponible y esto ayuda incluso al registro diario de nuestros gastos.
La especialista también explicó que una de las funciones de la tarjeta de débito es que podemos contar con el dinero en efectivo cuando retiramos el mismo en un cajero automático. Para realizar esta operación es necesario contar con la tarjeta física e introducir el pin y contraseña de forma segura.
Por otra parte, Lindner destacó que las transferencias bancarias ganaron terreno entre las formas de pago más utilizadas. Para ello, no hay necesidad de contar con la tarjeta física sino que el único requisito es que las dos personas deben contar con cuentas bancarias.
Otra de las formas de pago que mencionó la directora fue el cheque: al día o diferido y aclaró que si bien se encuentra en desuso en la actualidad, se acostumbra a utilizar a nivel de comercios. Una de las desventajas que aclaró Lindner fue que para la economía en general es un tanto complejo y costoso administrar cheques. Por este motivo, sostuvo que las transferencias bancarias resultan más eficientes en la actualidad.
Servicios de ahorro
El ahorro se define como ingresos menos gastos durante el mismo periodo temporal. También se puede interpretar como la renuncia al gasto de hoy para tener ese beneficio en un futuro. Pero, ¿para qué es tan necesario ahorrar? Nos puede surgir un imprevisto y es necesario contar con una cobertura económica para riesgos y no tener que endeudarnos en el momento, esto funciona como fondo de emergencia.
Sin embargo, también podemos ahorrar para la jubilación o con el objetivo de invertir, lo que requiere una mayor planificación a largo plazo. Además, Lindner sostuvo que lo más conveniente es ahorrar al menos el 10% de nuestros ingresos y trazarnos objetivos claros y reales sobre dónde queremos destinar ese dinero.
Otra recomendación que realizó la especialista en educación financiera fue reservar el dinero destinado al ahorro como primer hábito una vez que recibimos nuestro ingreso mensual. De esta manera, evitaremos caer en gastos innecesarios y siempre contaremos con un fondo de emergencia o una inversión a largo plazo.
Como parte de los servicios de ahorro que ofrece el sistema bancario, Lindner mencionó la caja de ahorro y el depósito a plazo fijo. Este último funciona si nuestro objetivo es adquirir algo a largo plazo, mientras que la caja de ahorro sirve para un fondo de emergencia o fondo común.

Lindner destacó que en la actualidad, la caja de ahorro es una de las herramientas más utilizadas ya que sirve para cobrar el salario, jubilación o realizar transferencias. De hecho, en el caso de los servicios ofrecidos por el BROU, no cobra comisiones y permite realizar al menos ocho operaciones gratuitas.
Línea y tarjeta de crédito
La especialista en educación financiera estableció las diferencias entre las líneas de crédito y las tarjetas de crédito. En referencia a estas últimas, destacó la importancia de registrar los gastos y realizar un correcto uso de la misma para no endeudarnos. En ese sentido, resaltó que abonar el pago mínimo que indica el estado de cuenta y pagar fuera de fecha no es conveniente ya que es una forma de acumular recargos a futuro.
Lindner explicó que las tasas de intereses de tarjetas de crédito se ubican entre 70% y 100% anuales e hizo hincapié en la importancia de llevar un correcto registro de las compras para pagar dentro de nuestras posibilidades y evitar recargos.
Por otra parte, explicó que la línea de crédito funciona como préstamo: monto que recibo hoy y pago en cuotas a futuro. Sin embargo, la suma de esas cuotas será superior al monto inicial ya que incluyen intereses, lo que se conoce como Tasa Efectiva Anual.
El BROU no exige ingreso mínimo ni limita a un ingreso máximo a la hora de solicitar un crédito y no realiza descuentos a excepción de aquellos que corresponden a deudas anteriores, por ejemplo, la renovación de un crédito.
Para renovar un préstamo no es necesario cancelarlo totalmente, a excepción de préstamos especiales. Además, uno de los requerimientos para ello es el pago de un porcentaje mínimo de amortización de cuotas, el cual varía según la operación elegida.
Ahorrar en UI
Lindner destacó la importancia de ahorrar en Unidades Indexadas (UI) y dijo que si bien una de las monedas más tradicionales a la hora de ahorrar a largo plazo es el dólar, la UI cuenta con una serie de beneficios a largo plazo.
Uno de los principales motivos es que la UI mantiene el poder de compra ya que aumenta al mismo ritmo que la inflación. Al momento de su creación -durante la crisis del 2002- una UI era equivalente a $ 1, y en la actualidad cada UI se ubica en el entorno de $ 6,30.
En ese sentido, explicó que el depósito a plazo fijo como servicio financiero tiene interés, ya sea en pesos, dólares o en UI y agregó que estas tasas son distintas según cada moneda, plazo y modalidad que se haya definido. Este cobro de intereses puede ser al vencimiento o mensual, a excepción de la UI, en la que puede ser al vencimiento o trimestral. La particularidad que presenta esta moneda es que el capital va a mantener la capacidad de compra en el largo plazo.
El dólar sigue siendo una de las monedas más tradicionales y utilizadas para ahorrar, sin embargo, Lindner destacó que el mismo puede sufrir variaciones en el día a día y agregó que esta dinámica puede servir si vamos a realizar un viaje a un destino cuya moneda sea el dólar. En cambio, resaltó que es conveniente ahorrar y endeudarse en moneda nacional para cubrir cualquier imprevisto.
El depósito a plazo fijo es una buena opción para ahorrar con el objetivo de realizar compras importantes a futuro y otro de los beneficios que se destaca es que en el caso de volcar sus intereses en una caja de ahorro, cuenta con la exoneración de comisión de administración.