Redacción El País
La calificadora de riesgo Fitch Ratings emitió un mini reporte sobre Uruguay y los pasos que tendría que seguir para mejorar su nota de la deuda (y reafirmar la mejor de la historia), al tiempo que criticó algunos aspectos fiscales del gobierno y la propuesta del Pit-Cnt de un plebiscito contra la reforma jubilatoria.
Fitch había elevado en junio pasado la nota de Uruguay de BBB- a BBB (esto es un escalón por encima del mínimo del grado inversor) y con perspectiva “estable” a esa calificación. Otras tres calificadoras (Standard & Poor’s, Moody’s y R&I) tienen a Uruguay con nota BBB+ (dos escalones por encima del mínimo del grado inversor), la mejor calificación de su historia.
“La regla fiscal de Uruguay está ayudando a mejorar la credibilidad fiscal, pero aún tiene que anclar la consolidación lo suficiente como para estabilizar completamente la realción deuda/Producto Interno Bruto”, dijo Fitch Ratings. “Una mayor consolidación consistente con la reducción de la deuda respaldaría una mejora” de la nota, agregó.
En este mini reporte, la calificadora recordó que “el gobierno central registró un déficit del 3,3% del PIB en 2023, por encima de la proyección presupuestaria original del 2,6%, pero en línea con una proyección revisada del 3,2% que incorpora los efectos de la reciente y grave sequía”.
Regla fiscal y los cuestionamientos a cambiar las metas
“El gobierno volvió a cumplir su regla fiscal introducida en 2020, incluido el límite de gasto asociado, el tope de endeudamiento neto y el objetivo de resultado fiscal estructural. Esto se debió en parte a una cláusula de escape en el límite de endeudamiento invocada para la sequía y una revisión previa del objetivo de resultado estructural”, indicó.
Fitch destacó que “la regla fiscal de Uruguay está mejorando la credibilidad de las políticas al facilitar un mayor escrutinio y rendición de cuentas en torno al desempeño fiscal (incluso a través de un consejo fiscal independiente) y desalentando un sesgo político procíclico”. También resaltó que “la reforma de las pensiones del año pasado representa un esfuerzo proactivo para abordar los desafíos a largo plazo, en consonancia con los sólidos puntajes institucionales del país”.
“Estos fueron factores clave en la actualización (de la calificación de Uruguay) de junio (pasado) de Fitch”, añadió la agencia.
“Sin embargo, la regla (fiscal) solo ha facilitado una consolidación moderada, y el déficit solo disminuyó hasta el 3,3% del PIB en 2023 desde el 3,9% en 2019. Las autoridades estiman una mejora mayor en el saldo estructural (1,8 puntos porcentuales del PIB), pero existe cierta incertidumbre sobre este cálculo”, advirtió Fitch.
A su vez, cuestionó que “la reciente relajación de las metas fiscales -que hizo el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF)-, aunque modesta, pone de relieve cómo la consolidación se está volviendo más difícil”. Esto había sido advertido por el Consejo Fiscal Asesor, quien en su informe de fin de febrero había dicho que “esta modificación puede constituir una señal negativa con potenciales daños a la credibilidad de la institucionalidad fiscal”.
La calificadora recordó que el MEF elevó “su proyección de déficit para 2024 y el objetivo de déficit estructural por segundo año al 3,0% y 2,9% del PIB, respectivamente, desde el 2,3% del PIB para ambos en 2022”.
“Los beneficios sociales agregarán presión, ya que su indexación hacia atrás revertirá los ahorros de años anteriores cuando la inflación era alta. Por lo tanto, la consolidación dependerá de una mejora cíclica de los ingresos, que es incierta, y de una restricción del gasto, que puede ser más difícil en un año electoral”, alertó Fitch.
Aumento de deuda
El informe señaló que la deuda de la administración pública aumentó 4 puntos porcentuales hasta el 63,3% del PIB en 2023, por encima de la mediana 'BBB' (es decir, la mediana de países que tienen la misma calificación que Uruguay) del 55% del PIB.
“Esperamos que déficits (fiscales) de alrededor del 3% del PIB mantengan la relación deuda/PIB en una ligera trayectoria ascendente. Esto es consistente con nuestros supuestos subyacentes a la mejora de junio, y no es un riesgo significativo dado el fuerte acceso al mercado que tiene Uruguay y el creciente uso de financiamiento en el mercado local”, señaló Fitch.
“Sin embargo, limita el aumento de la calificación, para lo que se requeriría la acumulación de margen fiscal a través de una menor relación deuda/PIB”, advirtió.
Próximo gobierno y crítica al Pit-Cnt
“Los planes fiscales del próximo gobierno después de las elecciones de octubre de 2024 serán importantes para la trayectoria de calificación de Uruguay”, señaló el reporte.
“Las rigideces en el gasto y la presión para abordar las demandas sociales podrían dificultar una mayor consolidación, y el apetito por aumentar los impuestos no está claro”, explicó la calificadora.
De todas maneras, “las calificaciones también podrían beneficiarse de evidencia de un crecimiento más fuerte, después de un desempeño moderado en relación con sus pares en la última década, o de una mejora en la credibilidad de la política monetaria después de algunos avances recientes”, señaló.
Fitch dijo que el Pit-Cnt “está presionando para que se celebre un plebiscito para revocar la reforma de las pensiones y reformar el sistema de pensiones en general”.
“Esto podría tener implicaciones significativas para las finanzas públicas y los fondos de pensiones en el corazón del mercado de capitales local”, cuestionó.
“Por ahora, parece poco probable que el plebiscito tenga éxito y la decisión de la coalición opositora Frente Amplio de no respaldarlo indica un consenso político básico en torno al modelo económico y la continuidad de las políticas”, concluyó Fitch.
-
Moody’s se suma a dos agencias que dan calificación histórica a Uruguay y Arbeleche cuestiona a gobiernos del FA
Uruguay reafirma su mejor calificación de deuda de la historia, luego de que Moody's le incrementara la nota
¿Qué va a pasar con el dólar, la economía uruguaya, el déficit y los precios en 2024 y 2025?