Redacción El País
El presidente del Banco Central del Uruguay (BCU) anunció en la tarde de este jueves su renuncia al cargo. Lo hizo pocas horas después de inaugurar la Jornadas Anuales de Economía, oportunidad en la que aprovechó para hacer un balance de su gestión sin hacer referencia alguna a que abandonaría el puesto.
“En el BCU logramos dos objetivos: estabilidad financiera y estabilidad de precios”, fueron prácticamente sus primeras palabras en el evento, antes de enumerar los temas de la convocatoria, con 23 panelistas y 26 artículos y sesiones contributivas.
Consultado por El País sobre el mayor desafío para la próxima administración, respondió: “A veces a Uruguay le cuesta hacer los cambios rápidos, pero una vez que cambia y da resultados, los mantiene. Hace cuatro años nos propusimos un régimen de objetivo de inflación bien robusto que nos ayudara a llevar la inflación adonde queremos que esté, que es en el centro del rango, que es del 4,5%. Eso lo conseguimos. La nueva administración va a tener el desafío de continuar con eso, pero claramente, cuando uno ve los resultados, la nueva administración va a seguir y los nuevos directorios al mando van a continuar con esta política, porque es una política exitosa”.
Anoche el propio presidente de la República Luis Lacalle Pou emitió un reconocimiento público a la gestión de Labat a través de su cuenta de X: “Hoy renunció a la presidencia del BCU @DiegoLabat Hace muchos años tomó una decisión de dedicarse al servicio público. Desde ese momento ha cumplido a cabalidad función. Actor fundamental en el combate a la inflación con un % en el menor registro de hace años. Gracias Diego!”, publicó.
Labat será subrogado por Washington Ribeiro que hasta ahora se desempeñaba como vicepresidente del Directorio de la entidad, y que entre 2010 y 2020 también integró ese cuerpo, pero como representante del Partido Nacional.
En círculos políticos aseguran que Labat se integrará al equipo de campaña del candidato presidencial nacionalista, Álvaro Delgado, y que sería el próximo ministro de Economía y Finanzas en caso de una victoria electoral nacionalista.
![Comision de Seguridad Social](https://imgs.elpais.com.uy/dims4/default/f4db37e/2147483647/strip/true/crop/5568x3711+0+0/resize/1440x960!/quality/90/?url=https%3A%2F%2Fel-pais-uruguay-production-web.s3.us-east-1.amazonaws.com%2Fbrightspot%2Fc1%2F0d%2F0ec6370b463daff812d9e04dfb44%2Fimagen-ffl-5230.jpg)
Es alguien en quien el presidente depositó su confianza y le dio “carta blanca” para llevar adelante un plan para bajar la inflación, que en buena medida fue diseñado por los técnicos del Central. Y el resultado ha sido que la inflación está en los niveles más bajos desde 2005 (4,96% en 12 meses a junio) y lleva trece meses dentro de la meta del BCU. Aunque las críticas han llegado desde el sector exportador por el valor del dólar y lo que entienden como “atraso cambiario”, algo que Labat ha rechazado.
Labat como presidente del Banco Central tenía vedado hacer política partidaria. En una entrevista con el semanario Búsqueda en enero de este año, fue preguntado sobre si renunciaría o seguiría hasta el final del período y respondió: “Hoy soy el presidente del BCU. Esa es mi respuesta final”. Luego fue consultado si le gustaría ser ministro de Economía y Finanzas y Labat dijo: “No contesto”.
No obstante, ya había marcado algunos aspectos para el próximo período. En una entrevista con El Observador en agosto de 2023, Labat dijo que “la inflación en torno a 3% debería ser el objetivo” en el próximo período. Casualmente, el programa de Delgado en materia económica dice como uno de los objetivos: “avanzar hacia una macroeconomía aún más estable y bajar la inflación al 3%”.