Redacción El País
El turismo uruguayo relacionado con el vino genera por año unos US$ 11 millones, según un estudio elaborado por Opción Consultores a pedido del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi).

El estudio -al que accedió El País- abordó el impacto económico del enoturismo en Uruguay, así como sus desafíos, amenazas y oportunidades, según la información brindada por los propietarios o gestores de los establecimientos de enoturismo nacionales.

De acuerdo con el estudio, actualmente en Uruguay operan 49 bodegas y viñedos distribuidos en nueve departamentos, con Colonia, Canelones, Montevideo y Maldonado posicionados como los cuatro departamentos con mayor participación en el rubro, seguidos por San José, Rivera, Paysandú, Artigas y Salto.

De los 30 propietarios o gestores de establecimientos enoturísticos encuestados, el 97% ofrecen tienda o venta de vinos, mientras que el 93% ofrece tours de degustación y visitas a bodegas o viñedos. Asimismo, el 70% señaló que realiza festivales en su establecimiento, el 67% indicó que hace eventos especiales y el 50% que ofrece servicio de restaurante.

Según lo relevado, los servicios vinculados al turismo empezaron a promocionarse principalmente con el objetivo de mejorar la rentabilidad actual o futura. En ese sentido, se reflejó que el porcentaje de enoturismo en la facturación de estos establecimientos es mayor al 25% en poco más de la mitad de los lugares encuestados.

En estos establecimientos, las ventas de vinos son la principal fuente de ingresos (40%); le sigue en importancia las degustaciones y visitas (29%); el servicio de restaurante (15%). Sin embargo, si se considera los establecimientos que tienen ese servicio gastronómico, la cifra sube a 39%. En tanto, los eventos especiales representan el 14% de la facturación; y en último lugar los festivales y el alojamiento (3% y 2%, respectivamente). Si bien los ingresos por hospedaje representan apenas el 2% del total, si se considera solo los que ofrecen este servicio, el porcentaje sube a 23%.

Los principales visitantes de estos establecimientos son en su mayoría brasileños (39%), seguido por los uruguayos (37%) y argentinos (10%), con un gasto promedio por visita de unos US$ 76.

Según lo relevado por Opción Consultores, “se proyecta una mejora en el sector enoturístico en el Uruguay, ya que se visualiza como un sector con potencial y que en base a la experiencia ha sido rentable”. En este sentido, las perspectivas a cinco años de los actores del sector son positivas con el 87% que respondió que la situación económica de su establecimiento será mejor.