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Los exportadores se sienten jaqueados por las trabas comerciales que aplica Argentina y la racha negativa del dólar, ante lo que reclaman medidas para las empresas afectadas. El gobierno analiza el tema y le preocupa el impacto en los servicios.

Para los exportadores, reclamar ante el Mercosur o la Organización Mundial del Comercio (OMC) -como plantea la Cámara de Industrias- no sirve ya que ven que "Argentina no va a cumplir nada del Mercosur", dijo a El País la secretaria ejecutiva de la Unión de Exportadores (UEU), Teresa Aishemberg.

Recurrir a la OMC o a los Tribunales Arbitrales del Mercosur "no vemos que tenga andamiento porque ellos no van a dar marcha atrás a su plan. No hacen caso al Mercosur", dijo.

En este sentido, la UEU plantea al gobierno que se busquen "soluciones" a las empresas que ven trancadas sus exportaciones a Argentina y que se las ayude "a que tengan competitividad en otros mercados".

Según un relevamiento del sitio especializado en comercio Global Trade Alert, Argentina es el país del mundo que más medidas proteccionistas ha tomado con 182, (ver gráfico).

Aishemberg dijo que "sí" se sienten jaqueados por estas medidas, a las que se suma la peor racha del dólar en casi 11 meses. La debilidad de la moneda estadounidense "vino para quedarse" y "afecta la rentabilidad de las empresas", aseguró.

Por su parte, en el Consejo de Ministros de ayer, quedó clara la preocupación que existe por la relación con Argentina debido a las trabas comerciales y la percepción de una buena relación con el gobierno de Brasil, que mostró disposición a solucionar los problemas que afrontan algunas firmas uruguayas para ingresar sus productos a ese país.

El presidente José Mujica y los ministros dialogaron con inquietud sobre los diferentes temas de la agenda bilateral con Argentina. En especial se manifestó preocupación sobre cómo afectará a Uruguay la norma que exigirá a partir del 1° de abril declaraciones juradas a la importación de servicios que tomó gobierno de Cristina Fernández, dijeron a El País participantes de la reunión.

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker -que fue uno de los voceros del cónclave- negó ayer que se hubiera tratado el tema Argentina.

Los participantes de la reunión contaron que Mujica dijo que los problemas comerciales con Argentina y las posibles soluciones se analizarán en una comisión integrada por los ministerios de Relaciones Exteriores, Industria y Economía.

Desde el 1° de abril, quedarán incluidos en el régimen de declaración jurada de importaciones que aplica Argentina todo lo que concierne a servicios. La medida es para operaciones superiores a los US$ 100.000 anuales y abarca desde servicios de información e informática, patentes y marcas, derechos de autor hasta primas por préstamos de jugadores de fútbol, servicios empresariales y técnicos, servicios personales, culturales y recreativos, entre otros.

La Asociación de Bancos Privados del Uruguay aún no analizó el impacto de estas restricciones, pero abordará el tema en los próximos días. Asimismo, la Cámara de Zonas Francas está recabando información con los distintos clientes que prestan servicios con la vecina orilla para tratar de cuantificar el efecto que tendría el pedido de declaraciones juradas.

En el año cerrado a septiembre de 2011 (último dato disponible), Uruguay exportó en servicios US$ 3.216 millones (no todos a Argentina), de los que US$ 2.057,9 millones corresponde a turismo (que no está comprendido en las trabas).

En contraste con la situación de Argentina, en el Consejo de Ministros se valoró en forma muy positiva la relación actual con el gobierno de Dilma Rousseff. El canciller interino Roberto Conde hizo un informe sobre la misión que visitó Brasil y destacó la buena voluntad mostrada por las autoridades en buscar soluciones para la exportación de productos uruguayos que tienen trancado su ingreso a ese país.

El gobierno de Brasil abrió una instancia de trabajo técnico concreto para destrabar el ingreso de frazadas y de productos del sector automotriz (fundamentalmente de la empresa EFFA) y aguardará que Uruguay presente una contrapropuesta técnica para reanudar la exportación.

DÓLAR. A las dificultades que tienen los exportadores por las medidas proteccionistas, se suma la caída del dólar. Ayer, acumuló la sexta sesión seguida de caída, la racha negativa más prolongada desde principios de abril de 2011, presionado por una constante oferta de divisas.

El dólar interbancario fondo se operó en el menor nivel desde fines de octubre, $ 19,35, un 0,12% por debajo de la media del viernes. La divisa acumula una caída de 1,33% en febrero y de 2,75% en 2012.

La intervención estatal debió ser tal para contener el ritmo bajista, que la operativa a través de la Bolsa Electrónica fue la más alta del año: US$ 35,6 millones, de los cuales US$ 16 millones fueron compras del Central.

Agentes cambiarios consultados por El País explicaron que no avizoran un cambio de tendencia en el billete verde. Aishemberg dijo que "si no acompañamos a Brasil en la baja de tasas vamos a perder competitividad con nuestro principal socio y además perderemos competitividad cuando Brasil sale al mundo".

Preocupa al gobierno el impacto de trabas a los servicios.

-¿Qué objetivos persigue su visita a Uruguay?

-Luego del viaje (a México) del presidente, José Mujica, quedamos con el compromiso de revisar varios aspectos de la relación bilateral. Por eso era importante venir Uruguay a dejar muy claro que para nosotros este país es un socio estratégico muy importante.

-Quedan algunos temas pendientes como el ingreso de leche en polvo y el aumento del cupo de quesos. ¿Cuándo podría quedar aprobado?

-Hace una semanas se le comunicó al gobierno cuál era la solución que México ofrecía en relación a la leche en polvo con el objetivo de abrir la importación a 5.000 toneladas (anuales) para Uruguay. La fecha de ingreso de la leche en polvo quedará definida una vez que se reúna la comisión de comercio de ambos países a mediados de este mes, y luego el trámite recorrerá los caminos internos de cada país.

-En los últimos meses se ha acentuado la política proteccionista de los socios comerciales de Uruguay como Argentina y Brasil. De hecho, el propio Brasil quiere revisar el acuerdo automotor con su país. ¿Cómo ve este contexto?

-Mañana (por hoy) estaré en Brasil para conversar sobre este tema. México quiere incrementar el comercio en la región. La verdad es que el comercio que tenemos con Brasil es aún muy pequeño teniendo en cuenta que es una de las economías más grandes de América Latina. Estamos abiertos a escuchar cuál es la problemática que Brasil presenta. Muchas veces, a ciertos países ante una situación crítica de la economía, se les presentan como caminos de solución fáciles poner medidas que restringen el comercio. Para nosotros cuánto más abierto es el comercio regional, es más sólida la relación que pueda entablarse a futuro.

-Uruguay tiene en la vestimenta uno de los sectores más golpeados por las trabas de Argentina. ¿México tiene interés en importar esta mercadería?

-Evidentemente si comienzan a existir medidas en ciertos países donde se restringe el comercio, nosotros estamos abiertos a aplicar y extender el comercio con la región. Habrá que entender muy bien qué es lo que están proponiendo los actores para saber cuál deberá ser el grado de acción que tomamos al respecto.

-¿Y por qué algunos países toman acciones en sentido contrario?

-Hay que ser muy respetuosos de la soberanía de cada uno de los países. México ha tomado dos caminos. En primer lugar, el de tener más TLC con diferentes países y otro que es el de disminuir nuestros aranceles unilateralmente. Tenemos TLC con 44 naciones y por eso somos el décimo exportador mundial.

Visión: Hay países a los que les es "fácil" poner medidas que "restringen comercio".

La Comisión Europea (CE) -el órgano ejecutivo de la Unión Europea- divulgó ayer su segundo informe sobre Barreras al Comercio y las Inversiones en el que criticó las medidas proteccionistas de Brasil y, principalmente, de Argentina.

"No se obtuvieron mejoras en los obstáculos identificados en el año 2011 para (dos) países del Mercosur, donde, por el contrario se observó la continuidad de algunas tendencias proteccionistas", afirmó la CE.

"Para algunas de estas barreras (por ejemplo, restricciones en el transporte marítimo), la negociación del TLC" entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur "es el marco principal donde se están debatiendo actualmente estas cuestiones", se agregó en el documento. La CE planteó estas situaciones "irritantes" en forma bilateral con ambos países y "lo seguirá haciendo en 2012".

Respecto a Argentina, recordó que la imposición de licencias no automáticas para la importación, que ahora cubre 589 líneas arancelarias, "afecta al 12,3% de las exportaciones de la UE. Las pérdidas estimadas para empresas europeas por las licencias fue de US$ 147 millones entre enero y septiembre pasado, agregó.

Al igual que Uruguay, hasta ahora la CE optó por el diálogo con Argentina para levantar estas trabas.

"La Comisión ha planteado esta cuestión a Argentina en varias ocasiones, tanto a nivel bilateral y, junto con un gran número de otros países en los órganos pertinentes de la Organización Mundial del Comercio", señaló. Las respuestas que recibió del gobierno de Cristina Fernández fueron parecidas. "Tras las intervenciones de la Comisión, el gobierno argentino ha mostrado una disposición limitada a encontrar soluciones sobre una base del caso por caso", indicó en el documento. "Esto ha contribuido a aliviar en algo los casos más graves para las empresas europeas. El problema, sin embargo, sigue siendo muy grave", afirmó la CE y recordó la medida que obliga que por cada peso argentino importado la empresa debe exportar la misma cifra.

"Dada la gravedad de la situación, la Comisión está examinando todas las opciones posibles, incluyendo lanzar en la OMC un procedimiento de solución de controversias. Esto incluye las consultas con otros países afectados por esto", añadió. "Hay un peligro de que medidas tales como las licencias de importación no automáticas permanezcan", afirmó la comisión.