Redacción El País
El decreto que aprobó el Poder Ejecutivo que reconoció a los generadores privados de energías renovables no convencionales (como la eólica, fotovoltaica y biomasa) la capacidad de suministrar potencia firme de largo plazo, será modificado ante algunos reparos presentados por el directorio de UTE.
Según admitió el ministro de Industria, Omar Paganini, en el decreto había “ambigüedades que podían generar algunos problemas” y que fueron advertidos por la presidenta y el vicepresidente de UTE, Silvia Emaldi y Julio Luis Sanguinetti, respectivamente.
Este miércoles hubo una reunión en la Torre Ejecutiva entre parte del directorio de UTE, Paganini, el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado y el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Isaac Alfie, para analizar los ajustes al decreto.
“Había efectivamente algunos reparos atendibles desde nuestro punto de vista”, hechos por Emaldi y Sanguinetti, dijo Paganini este jueves en rueda de prensa.
“Se llegaron a algunos ajustes que creo que precisan mucho mejor cuál es el mercado mayorista que va a funcionar, sin cambiar para nada el fondo de la situación, pero sí definiendo a partir de un cierto nivel de potencia, cuáles son los grandes consumidores que pueden participar del mercado”, señaló el jerarca del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM).
Asimismo, Paganini manifestó que “posiblemente no haya demasiadas dificultades por el lado de UTE” para poder implementar dichos cambios.
Sin embargo, la directora de UTE en representación del Frente Amplio, Fernanda Cardona, rechazó el anuncio del ministro y criticó que las modificaciones propuestas no cambian “en nada los perjuicios” que sostiene que tendrá la normativa para la estatal.
“El gobierno modifica el decreto de potencia firme que sancionó hace apenas unos días. Además de revelar la desprolijidad con la que se trata un tema tan medular para el mercado eléctrico, este cambio no modifica en nada los perjuicios que veníamos advirtiendo para UTE”, señaló Cardona, quien ya presentó un recurso contra el decreto.
El ministro defendió la normativa aprobada y dijo que el gobierno “apuesta” a este cambio con el objetivo de “atraer inversiones” en el sector eléctrico uruguayo.
Según Paganini, la normativa está pensada “para los grandes consumidores” de energía eléctrica, los mayoristas, pero admitió que se debe “definir bien el borde” que determine quiénes podrían usar el nuevo régimen.
“Había un cierto temor de que fuera demasiada gente la que pudiera tomar esta opción”, admitió el ministro y contó que en la reunión con UTE ya se definió “cómo va a funcionar” y “cuántos clientes, eventualmente podrían ampararse en ese nuevo reglamento”.
Al ser consultado respecto a esa cifra, Paganini estimó que serán “menos de 100” grandes clientes de UTE los que podrían beneficiarse del nuevo decreto y pasar a hacer negocios con los privados.
Días atrás, El País había informado que el directorio de UTE estaba dividido ante la falta de consenso sobre los efectos del decreto en la estatal. Cardona y el director representante de Cabildo Abierto, Enrique Pees Boz, rechazaron la normativa; Emaldi y la directora del Partido Nacional, Mariana Ubillos la respaldaron; y el vicepresidente había pedido modificaciones.