Las playas de los diferentes departamentos costeros del Uruguay se han visto colmadas por turistas, ante las altas temperaturas, con el fin de aprovechar hasta el último momento la licencia, ya sea con familia o amigos.

En ese sentido, operadores inmobiliarios de la costa local dialogaron con El País para constatar cómo notaron la ocupación, en sus respectivos departamentos, tanto con respecto al turista local como al internacional.

Javier Sena, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Punta del Este/Maldonado, sostuvo que durante la primera quincena constataron una llegada de 95% en lo que refiere a propietarios y un 85% en relación con las propiedades en alquiler.

Asimismo, dijo que la gastronomía “se movió mejor” y la hotelería de cuatro y cinco estrellas “ha mejorado un poco” en relación con el 2023. En ese sentido, si se compara con la temporada 2017 (la mejor temporada en la última década, según indicó el ministro de Turismo Tabaré Viera a El País), indicó que “hay más gente” pero aun así “están gastando menos”.

“Desde esa época hasta ahora se han hecho cantidad de edificios y casas nuevas. Hay más gente y más casas que en 2017, pero el gasto de esa época sigue siendo superior al día de hoy. Se nota en lo que deja la gente en los comercios y en los alquileres”, agregó.

En cuanto al flujo de extranjeros, Sena afirmó que la cantidad de brasileños aumentó en relación con el año pasado, pero vinieron un 65% de argentinos en comparación a la temporada anterior.

En este sentido, esperan que durante la próxima temporada mejore el gasto de los argentinos, ya que “son nuestro principal cliente”.

“Lo que gasta el argentino ayuda a levantar el gasto per cápita, pero la diferencia cambiaria es lo que complica”, explicó Sena.

En ese marco, afirmó que durante esta quincena “la diferencia la hacemos con el 95% de propietarios que llegaron al departamento”, debido a “la clase media argentina que no pudo venir o eligió la costa argentina”.

Por su parte, Andrés Castellano, presidente de la Asociación Turística de Colonia, manifestó que en dicho departamento se llegó a un 74% de ocupación entre el 1 y 13 de enero. En esa línea, prácticamente, se mantuvo en relación con el mismo período del 2023, ya que allí se llegó al 75% de ocupación.

En cuanto a la ocupación hotelera, dijo que fue “bastante pareja” en los hoteles de cinco, cuatro y tres estrellas, al igual que en posadas y hostels.

“Eso indica que hubo un flujo más heterogéneo de turistas con distintos bolsillos”, agregó.

Los días de mayor ocupación de la quincena, según Castellano, fueron durante el 6 y 13 de enero, con un 90 y 86% de ocupación respectivamente.

En lo que refiere a la gastronomía, dijo que hasta el 10 de enero “ha sido buena”, aunque “se sintió una baja” durante el último fin de semana de la quincena.

Consultado por el flujo de turistas extranjeros, indicó que han notado crecimiento en relación con los brasileños. De hecho, manifestó que en los centros de información turística constataron 7.329 visitantes, de los cuales 4.867 fueron brasileños.

De todas formas, Castellano afirmó que ya habían visualizado el incremento de brasileños en Año Nuevo, ya que durante las noches del 30 y 31 de diciembre de 2023, el 48% del total de ocupación en Colonia fue gracias a los visitantes del país vecino.

Respecto a los argentinos, afirmó que el flujo “está por debajo de los años anteriores, eso está claro”.

“El que viene es el de poder adquisitivo alto. El volumen de argentinos se achicó dadas las condiciones económicas que transitan. De todas formas, yo creo que el volumen se achicó inclusive en Argentina, se nota en sus costas. Argentina se encareció para el argentino y para cualquier turista del mundo”, agregó.

En tanto, Ricardo Pereira, representante de la Camara Inmobiliaria de Rocha, dijo que en general la quincena tuvo menor actividad que la de enero de 2023, especialmente después del siete de enero, fecha en donde “el movimiento cayó abruptamente”.

“Los brasileños desaparecieron prácticamente, quedan muy pocos. También se notó la falta de argentinos. No hubo público que compensara esa pérdida. Eso hace años viene decayendo y el público local no compensa, ya que viene por pocos días, sumado a que con la diferencia de cambio salen a veranear afuera. Hay una reducción del período de alquiler, ya nadie alquila por quincena, son cuatro o cinco días afuera”, explicó Pereira.

En esta línea, dijo que esta situación “en cierta medida beneficia a la hotelería, apart hotel, bungalows y cabañas con servicios”, ya que “la tendencia de alquiler de la gente ha ido cambiando y creo es irreversible”.

Dicha situación genera más dudas que certezas en el departamento rochense. “Por cómo está la situación, la temporada ya terminó. La expectativa de cambio para lo que resta de la temporada no la veo. No tengo duda de que ya se dio el pico de la temporada, ya la podemos apuntar en los libros”, concluyó el representante de dicha cámara inmobiliaria.