Redacción El País
Argentina enfrenta una “gigantesca batalla” en términos económicos y políticos, debido principalmente a la falta de credibilidad de las autoridades. Los economistas Ignacio Munyo, del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres) y Alfonso Capurro, socio de CPA Ferrere, coincidieron en que quien asuma la presidencia el próximo 10 de diciembre, lo primero que deberá hacer es un ajuste fiscal.

De acuerdo con Munyo, “es mucho más importante” saber cómo va a hacer el próximo gobierno para reducir el gasto público, antes que centrarse en la propuesta del candidato Javier Milei sobre dolarizar la economía o no y sus posibles efectos.

“La discusión ha estado en torno a la dolarización y eso para mí es secundario, acá la batalla gigantesca es cómo va a procesar Argentina la reducción del gasto”, señaló el economista este miércoles al participar del Seminario Regional Interamericano de Contabilidad.

Según el economista de Ceres, el ajuste fiscal es necesario en Argentina para empezar a frenar la emisión monetaria -que es lo que financia el gasto público- y a partir de ahí, “con o sin dolarización, recuperar la credibilidad”. Ese punto es “el más importante”, según Munyo, “para lograr que haya financiamiento externo y recién ahí poder empezar a tener otras inversiones”.

En relación a la diferencia cambiaria, el líder de Ceres dijo que Uruguay está 60% por debajo del promedio histórico del tipo de cambio bilateral entre ambos países.

“No voy a decir si este es un problema que lo tiene que arreglar uno o el otro” y tampoco “voy a decir si esto se va a arreglar rápido porque es muy difícil saber si Argentina va a procesar el ajuste de tipo de cambio real para que se arregle parte de este desequilibrio con Uruguay”, explicó Munyo, aunque dijo que a su entender, “probablemente” la diferencia cambiaria “se achique” el año que viene.

Capurro fue más tajante sobre este punto y afirmó que “se debe tener claro que Uruguay no puede arreglar” la diferencia cambiaria y los malos precios relativos que tiene con Argentina.

“Si algún uruguayo pretende que el Banco Central o que Uruguay corrija el desequilibrio que tenemos con Argentina, lo que estaríamos haciendo es meter para adentro todo el desorden que hay en Argentina y no queremos eso”, indicó.

En esta línea, el socio de CPA Ferrere remarcó que el desorden de Argentina “es culpa de sus problemas institucionales, políticos, fiscales, de su desorden monetario” y que, por tanto, en Uruguay “no tenemos por qué importar todo eso para acá porque somos distintos”.

Según Capurro, “no se puede pretender que Uruguay corrija esos desequilibrios vía depreciación de la moneda porque no lo vamos a corregir, y si lo hiciéramos, mal haríamos porque estaríamos comprándonos otros problemas”, advirtió.

Por esos motivos, para el economista de CPA Ferrere, el país debe entender que tendrá que convivir con este problema de su “díscolo vecino” hasta “por lo menos mediados del año que viene”.

Tanto Capurro como Munyo coincidieron en que la situación del país vecino implica “claramente un desafío” para la economía uruguaya, principalmente por los efectos negativos en el comercio y el turismo.

“El que piense que en enero vamos a tener una temporada (turística) fantástica, me parece que no está aquilatando bien el tamaño del problema” de Argentina, sostuvo Capurro.

El desequilibrio del país vecino ya es un problema para Uruguay, principalmente para el comercio fronterizo y el turismo, sobre todo de cara a la próxima temporada de verano.

“Es probable que por primera vez en la historia, Uruguay tenga saldo de balanza turística negativo” con Argentina, adelantó Capurro y señaló que si bien este no es “un drama” para el país en términos macroeconómicos, “en el fondo está reflejando un sector turístico bastante afectado tanto en turismo receptivo como emisivo”.

Al respecto, el socio de CPA Ferrere dijo que ese es “un desafío bien importante” para todos los sectores de la frontera, “quienes van a tener que lidiar varios meses más con esta situación”, así como también afirmó que será un reto para la política económica uruguaya.

Para Munyo, si bien es cierto que Argentina tiene “un gran partido” por delante que jugar, también tiene “múltiples recursos” con los que salir adelante.

“Mucha gente habla de un país fallado, yo no soy tan pesimista con Argentina, creo que tiene condiciones, siempre las tuvo, pero para aprovecharlas tiene que procesar un cambio fundamentalmente en su política fiscal” y así luego poder “conseguir la confianza necesaria para explotar todas las riqueza que tiene”, señaló Munyo.

Además, el economista de Ceres dijo que la sequía afectó fuertemente al país vecino y que eso la complicó aún más en términos macroeconómicos. “Lo de la sequía no es una excusa que puso el gobierno, de verdad los afectó”, afirmó Munyo.

Entre los principales recursos que tiene Argentina y que podrán mejorar su situación macroeconómica, el líder de Ceres mencionó el gasoducto presidente Néstor Kirchner -una megaobra para exportar energía-, sobre la cual afirmó que “implicará un ingreso muy importante” de dólares. “Los yacimientos que tiene en Vaca Muerta tienen mucho potencial” y también debe aprovechar sus reservas de litio, todo eso “es una muestra de los recursos naturales que tiene Argentina y que no ha podido explotar porque no ha dado señales de confianza para que los inversores apuesten” por el país, concluyó Munyo.