La guerra en Medio Oriente, ¿puede afectar precios en Uruguay y el cumplimiento de la meta del Banco Central?

Los mercados están atentos a la guerra en Medio Oriente. El precio del petróleo subió y, sumado a que el dólar en Uruguay también ha aumentado, entre otros factores, la inflación podría acelerarse.

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Guerra en el Líbano
Guerra en el Líbano
Foto: AFP

La guerraen Medio Oriente ha escalado con nuevos enfrentamientos entre Israel e Irán en varios frentes, lo que hace temer eventuales impactos en la economía global,comercio y el valor de intercambio de algunos productos. El precio del petróleo ha subido en estos días, lo que pone a los países importadores de crudo, como Uruguay, en desventaja comparativa. Y si la inflación mundial se dispara como tiempo atrás, es difícil que este país se escape de esos impactos, según analistas consultados.

Precio del petróleo

“Aún es prematuro trazar un pronóstico de cómo podrá impactar el conflicto de Medio Oriente en nuestra economía, pues la incertidumbre es muy elevada. Por lo pronto, el mercado está nervioso ante la eventualidad de que Israel decida atacar el complejo petrolero iraní que es su corazón productivo, lo cual ya se manifiesta en un alza en el precio internacional del barril”, afirmó a El País Marcelo Sibille, gerente senior de consultoría de KPMG.

El economista afirma que, aunque el volumen de producción petrolera de Irán es muy inferior al de otros países, como Estados Unidos y Arabia Saudita, no deja de ser un país relevante en el contexto global, figurando octavo en el ranking de producción mundial de crudo.

Por otro lado, la producción petrolera mundial es abundante en este momento como para abastecer la demanda sin mayores cambios. De hecho, han surgido nuevos productores de crudo en Brasil, Argentina y Guyana, entre otros.

“Hasta antes de la guerra, el tema de conversación entre los economistas era cuándo el precio del barril llegaría a menos de US$ 50, pero la demanda de petróleo sigue siendo alta. Su precio sube ahora por la guerra, pero tenderá a caer porque el aumento de la producción es mayor que la demanda”, opinó a El País el economista Jorge Piedrahita, CEO de Gear Capital Partners, desde Estados Unidos.

Petrolero en el mar Rojo
Petrolero en el mar Rojo

Inflación y tasas de interés

Es difícil estimar cómo continuará comportándose el precio del petróleo, pero, según Sibille, en caso de agudizarse el alza, inevitablemente impactará en primera instancia en la inflación doméstica.

“La estabilidad en el precio de los bienes transables (aquellos que se comercian con el exterior) fue el ancla que contribuyó a que la inflación convergiera a la meta del Banco Central (BCU) desde mediados del año pasado. Un coletazo en el precio del petróleo, sumado al alza que hemos visto en el tipo de cambio nominal, puede poner en riesgo la meta por factores ajenos al control del BCU”, advirtió Sibille.

Efectivamente, la inflación en Uruguay —llegó a 5,32% en 12 meses a setiembre— se encuentra cerca del tope máximo de la meta del BCU de entre 4% y 6%, por lo que un movimiento fuerte de algún rubro que la determina, podría hacerla salir de esa meta.

Al respecto, Mateo Fernández, gerente de Inversiones de AFAP Itaú, consideró que, si hay alza de inflación, la Reserva Federal (Fed) podría bajar la tasa de interés menos de lo que los mercados están esperando, lo que representa otra variable de impacto también en Uruguay. En este país, la tasa está en 8,5%.
 
Piedrahita coincidió en que la Fed no va a bajar las tasas de interés tanto como asume el mercado, ya que han surgido nuevos empleos en Estados Unidos y la economía de ese país está de nuevo está de nuevo “vibrante”, según sus palabras.

BCU
Banco Central del Uruguay.
Foto: Archivo El País

Además, aún hay efectos residuales de que los procesos de nearshoring y reshoring (mover producción de bienes cerca de los centros de consumo o en países amigos). “Esos movimientos suelen tener efectos levemente adversos en los precios. Por consiguiente, posiblemente veamos bajar la inflación en algún momento si el impacto de las guerras queda encapsulado. De darse así, las bajas de tasas se van a bajar solo un par de veces más y luego, tanto el Banco Central Europeo como la Fed van a tener que volver a analizar la situación”, afirmó Piedrahíta.

El economista considera que, si la guerra en Medio Oriente se mantiene dentro de “respuestas bélicas contenidas” entre las partes, sin afectar mayormente el tránsito de mercaderías a otras partes del mundo, los mercados internacionales no se verán mayormente alterados.

“En caso de guerra total —que abarca ataques a nivel de comunicaciones, radares, pistas de aterrizaje, aviones y demás—, Israel podría lanzar un infierno sobre Irán. Pero el propio Irán no quiere la guerra, porque pondría en riesgo el poder de los ayatolás. A Estados Unidos tampoco le conviene estar en otro conflicto adicional y tan lejano a su territorio”, analizó Piedrahíta.

Las bolsas no ven por ahora que el escenario se complique, por eso no se vieron afectaron hasta el momento. Pero si el precio del petróleo sube, será como un impuesto a buena parte del mundo. “Uno de los más afectados sería China y también Europa, porque Estados Unidos es bastante autosuficiente. Y se afectarían además aquellos otros países no productores de crudo, como Uruguay”, agregó.

Es decir, si da otro ciclo de suba de precios del petróleo, tendría un efecto negativo sobre la inflación mundial y ahí los países deberían tomar nuevas medidas para mantenerla bajo control.

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