Durante años los inversores argentinos eligieron Punta del Este como un resguardo de capital y de futura rentabilidad en el Uruguay. Sin embargo, tras el cambio para las construcciones bajo la ley de Vivienda Promovida, la centralización de servicios y más oportunidades para clientes de diferentes clases sociales, los inversores del país vecino han decidido pasar su carpeta de proyectos a Montevideo. En ese marco, ¿cómo visualizan los actores del sector dicho fenómeno inmobiliario?

Mauricio La Buonora, CEO en La Buonora & Asoc. Desarrollos, sostuvo que el inversor argentino no ha cambiado su comportamiento inversor en, al menos, los últimos 10 años, por lo que las mismas se vienen desarrollando “en un ritmo constante”, ya sea en Punta del Este o en Montevideo. Por un lado, quienes invierten en Maldonado, buscan “el resguardo de capital”, mientras que el perfil del argentino que invierte en la capital uruguaya se basa en “contar con renta anual”, por lo que muchas veces invierte en los edificios de vivienda promovida, es decir, “los que dan algún extra impositivo”, según La Buonora.

A su vez, el CEO de La Buonora & Asoc. Desarrollos sostuvo que el argentino de “poder adquisitivo alto” (que vino a vivir a Uruguay tras la pandemia) “está repartido entre Montevideo y Punta del Este”. En esa línea, dijo que se calcula que han llegado unos 30.000 argentinos hasta el momento, los cuales invierten y reforman propiedades grandes, por lo que “han levantado mucho el mercado inmobiliario residencial de alta gama”.

Por otro lado, destacó que si bien hay “mucha incertidumbre en Argentina” por su situación económica, hoy en día “sacar dólares en Uruguay es muy difícil”, lo cual “complica mucho las inversiones”, razón por la cual ”no ha crecido el monto de inversión de argentinos en Uruguay” en los últimos meses.

De todas formas, La Buonora opinó que no ve viable un escenario en donde los argentinos “vuelvan a llevar dólares (a su país) que tengan invertidos afuera”, por lo que esos capitales seguirán asegurados dentro del Uruguay.

“Creo que va a haber un aumento de inversiones una vez que la economía se acomode en Argentina”, agregó.

“Estamos tratando de motivar a argentinos que no han invertido nunca en Uruguay a que lo hagan, para que empiecen a experimentar y vean la seguridad jurídica que hay, las reglas de juego claras, la tendencia final de cambios en cuanto a la rentabilidad y el crecimiento del valor de las propiedades. Ese es el trabajo de hormiga que haremos en los próximos años”, sostuvo La Buonora en alusión a la promoción de inversiones inmobiliarias dentro del país.

Consultado por el atractivo que supone invertir en propiedades que se encuentren bajo el marco de la ey de Vivienda Promovida, el CEO de La Buonora & Asoc. Desarrollos manifestó que las mismas generan más renta en Montevideo que en Punta del Este. Sin embargo, agregó que alquilando unos pocos días en verano “sacan un promedio que da para cubrir los costos y a la vez la propiedad se sigue revalorizando”, por lo que ambas opciones hoy en día cuentan con buenas funciones.

Con respecto a los apartamentos en pozo en la capital, dijo que los mismos “generan buena rentabilidad” y a la vez “hay buenas oportunidades” ya que “la rentabilidad sobre esa inversión hace que los rendimientos financieros y los retornos de capital sean muy buenos”.

Por su parte, Matías Medina, vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya y director de Macari, sostuvo que en la actualidad a los inversores argentinos “no es necesario venderles Uruguay” como destino inversor ya que “somos un sello de garantía política, democrática, social e institucional”, aunque sí destacó que “día a día hacen más cuentas y no quieren tener problemas de rentabilidad”.

En ese sentido, dijo que gracias a la ley de Vivienda Promovida tienen más opciones de inversión en Montevideo que en Punta del Este (por un tema demográfico), sumado a que los perfiles de los posibles arrendatarios “es más variado por la composición de la capital”.

“Ahora el inversor se fija en Montevideo gracias a su centralización (servicios como hospitales, centros comerciales, universidades, entre otros) y porque los inmigrantes (posibles arrendatarios, más aún en el marco de la Vivienda Promovida) tienen más fuentes laborales en la capital. Hay un stock importante de viviendas que se están construyendo y que en un plazo corto de tiempo conseguirá mejor rédito en sus inversiones”, agregó.

Por otro lado, dijo que los inversores argentinos volcados a la capital no solo invierten bajo el lema de las viviendas promovidas, sino que también lo hacen en “viviendas usadas con muy buena rentabilidad con contratos vigentes” o hasta se animan a “construir proyectos de cinco a ocho unidades peor que les es muy atractivo y con mayor retorno de inversión”.

Cabe resaltar que la inversión en Montevideo por Vivienda Promovida equivale hasta el momento a unos US$ 2.461 millones, mientras que en el resto del país la misma llega a un monto de US$ 1.039 millones, según aseguró Medina.