Redacción El País
“No se terminaron los cierres con Yazaki”, dijo el presidente de la Confederación de Sindicatos Industriales (CSI), Danilo Dárdano a El País luego de la difusión de un comunicado en el que la gremial advierte sobre elcierre de empresas en Uruguay para instalarse en el mercado paraguayo. Según expresa el comunicado, la CSI busca mantener reuniones con las nuevas autoridades para hacer foco en el cierre de empresas.

El informe expresa: “Observamos con gran inquietud las informaciones recibidas sobre el traslado del área industrial (no la venta de productos) desde Uruguay a otros destinos de la región, fundamentalmente el mercado paraguayo” y agrega que desde el gremio están “convencidos que el desarrollo industrial de nuestro país esta directamente relacionado a como nos insertamos al mundo”.

Dárdano señaló que durante las próximas semanas se mantendrán reuniones con las nuevas autoridades del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS); Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM); Cancillería y cámaras empresariales para proponer normativas a nivel del Mercosur que permitan una “competencia leal” entre los países miembros.

Si bien el presidente de la confederación de sindicatos señaló que aún no se tiene un plan de acción definido, se está estudiando la situación del mercado paraguayo que según indicó, presenta bajos salarios, energía barata, un movimiento sindical “débil” y la llamada “Ley de Maquila”: un régimen que permite desarrollar la producción de inversiones extranjeras con importantes beneficios para la exportación de sus productos y servicios.

Paraguay cuenta con la fórmula “Triple 10”, donde los tres tributos más importantes -Impuesto al Valor Agregado (IVA), a la renta personal y a la renta empresarial- tienen la misma tasa del 10%, lo que lo posiciona como uno de los países con menor presión fiscal del continente.

Foto: Pamela Díaz

Según explicó Dárdano, la industria manufacturera en Paraguay representa el 20% de su Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en Uruguay alcanza el 10%.

La firma japonesa Yazaki cerró sus instalaciones en Uruguay para concentrarse en las plantas instaladas en Argentina y Paraguay. El presidente del sindicato sostuvo que la empresa reconoció parte de los beneficios que presenta el vecino país. Además, Dárdano agregó que varios sectores de actividad se encuentran en una situación “de peligro” como la industria láctea y el sector autopartista.