La persistente alza en la cotización de los bonos ha provocado que el riesgo país de Uruguay se ubique en los niveles mínimos desde que las agencias calificadoras le quitaron el "grado de inversión".
En efecto, tal indicador, medido a través del índice UBI elaborado por República AFAP bajó ayer hasta los 413 puntos básicos (pbs), el nivel más bajo desde el 14 de febrero de 2002, cuando la agencia Standard & Poor’s decidió rebajar la nota de la deuda uruguaya a grado especulativo. Previo al anuncio, este índice se ubicaba en los 381 pbs y al día siguiente, en 508 pbs.
Esto sugiere que la percepción de riesgo de cobrabilidad que el mercado tiene de la deuda uruguaya ha mejorado sensiblemente en los últimos meses, fundamentalmente de la mano del rally observado en los precios de los títulos de deuda emergente.
Particularmente en este grupo de países sobresale Brasil, que constituye la principal referencia para la deuda latinoamericana, cuyos bonos han registrado un fortísimo incremento en su cotización.
Las perspectivas de alzas más moderadas en las tasas de interés internacionales ha contribuido en gran medida a tal desempeño, a las que se suman el descenso en el precio del petróleo y esta semana el fortalecimiento de su moneda frente al dólar.
Los papeles uruguayos se han visto evidentemente favorecidos por este contexto regional, registrando en esta semana alzas que oscilan en torno a los 120 pbs y alcanzan a los 450 pbs en el transcurso de noviembre.
DOMESTICOS. El precio de los papeles que se negocian exclusivamente en el mercado doméstico como los Bonos del Tesoro, no ha sido ajeno a esta influencia, a la que se suma la demanda de papeles para participar en compras que a través de licitaciones ha venido realizando el Banco Central del Uruguay (BCU). El precio de las series físicas que negocian en BVM ha subido en promedio 40 pbs desde el viernes, acumulando en el mes ganancias del orden de los 290 pbs.
LETRAS. La tasa de interés de las Letras de Tesorería en pesos se mantiene en niveles bajos, no superando el 7% anual en ninguna de las licitaciones, incluso en aquellas a 90 días de plazo.